La cabeza de lista de Más País por la provincia de A Coruña, Carolina Bescansa, ha urgido este martes un gobierno «fuerte y progresista» después de las elecciones del próximo domingo para así acabar con la «crisis» que atraviesa el astillero vigués Barreras.
Tal como lo ha señalado Bescansa en declaraciones a Europa Press tras reunirse con representantes del comité de empresa de la compañía, los trabajadores necesitan «apoyo y respaldo» de las instituciones públicas, «empezando por la Xunta de Galicia y siguiendo por el Gobierno de España».
«Es muy difícil que situaciones tan complicadas como la que está atravesando el astillero se puedan abordar si no existen gobiernos fuertes. Por eso creemos que es imprescindible para que Barreras y muchos elementos del tejido industrial gallego puedan salir adelante que se conforme cuanto antes un gobierno fuerte y progresista», ha subrayado la candidata del partido liderado por Íñigo Errejón.
Por su parte, el presidente del comité de empresa de Barreras, Sergio Gálvez (UGT), ha apostado este martes por la venta del astillero al fondo de inversión Oaktree -inversor principal de Ritz Carlton- ya que la compañía necesita «apoyo financiero fuerte» para la construcción de barcos.
Preguntado sobre una posible entrada en el accionariado de los trabajadores y auxiliares, Gálvez ha asegurado que «está bien estar en el consejo de administración», sin embargo «para gestionar carteras de pedidos como las que tiene el astillero hoy por hoy, si no es con un consejo con gente que apoye económicamente de una manera importante es muy complicado».
IMPLICACIÓN DE LA XUNTA
En declaraciones a Europa Press tras reunirse con Carolina Bescansa, Gálvez ha indicado que se encuentra a la espera de que la Xunta «se implique de una manera fuerte» ya que se trata de un «drama» que implica a más de 1.000 personas solo dentro del astillero, a las que habría que sumar los trabajadores de las auxiliares.
«Estamos viendo que no son capaces de meterle el diente como nosotros pensábamos. La administración debería entrar y tenemos un problema fundamental con el primer accionista (PMI, filial de la petrolera mexicana Pemex) que es estatal y estamos esperando que la interlocución sea mucho más fluida y que busquen una solución lo más pronto posible», ha sentenciado.