El presidente de la Xunta y líder del PPdeG, Alfonso Rueda, ha dado a entender que no habrá medidas internas inmediatas contra el senador Manuel Baltar, expresidente de la Diputación de Ourense y del PP provincial, tras la decisión del Tribunal Supremo de remitir las actuaciones a Fiscalía y de solicitar que se le abra juicio oral por su caso de exceso de velocidad –en 2023 fue ‘cazado’ al volante de un coche de la Diputación a 215 kilómetros por hora–.
A preguntas de los medios sobre este caso, en la rueda de prensa posterior al Consello de la Xunta, Rueda ha aludido a que hay «unos estatutos» del partido y, tras confesar que «no» sabe exactamente qué decisión cabría tomar en concreto en este caso, se ha remitido a los mismos.
En todo caso, ha esgrimido que hay un proceso judicial abierto y que «habrá que estar a lo que diga» el mismo
UNIDAD EN TORNO A MENOR
Sobre el congreso que celebrará, precisamente el PP provincial de Ourense el próximo 13 de julio, y que tiene como único candidato a Luis Menor, quien sucedió a Baltar al frente de la Diputación y del partido en la provincia a la cabeza de una gestora, el líder del PPdeG ha ensalzado como «una transición que, desde fuera podría parecer complicada, se hizo de forma modélica».
«Ahí está la unidad interna del partido. Al final hay un congreso y una única candidatura, parece previsible el resultado», ha señalado, para concluir que «las cosas se hicieron bien» en el PP de Ourense y «deberían seguir bien».
MOCIÓN DE CENSURA
Rueda también ha vuelto a cargar, a preguntas de los periodistas, contra las «líneas rojas» del BNG en el marco de la negociación para una hipotética moción de censura en la ciudad de Ourense, y se ha reafirmado en su impresión de que lo que hay en la capital de As Burgas es más «postureo» que una intención real de cambiar al alcalde, Gonzalo Pérez Jácome (Democracia Ourensana).
En este punto, ha reiterado su convicción de que «alguien que quiere negociar» en serio no arrancaría, siendo la cuarta fuerza en apoyos en las últimas elecciones municipales del pasado año, con un veto a que la Alcaldía pudiese recaer en manos de un cargo del PP, formación que fue la segunda más votada en Ourense, tras Democracia Ourensana.