La Junta Electoral Provincial de A Coruña avaló en las pasadas elecciones generales de junio el argumento esgrimido por el Ayuntamiento de Santiago de que las instalaciones del colegio Cluny no tienen espacio para acoger una mesa electoral más.
Así lo solicitó entonces el PP santiagués, que este martes, a través de su concejala María Baleato, volvió a reclamar que el colegio Cluny acoja una mesa a mayores de las dos que ya tiene asignadas en lugar de que esta funcione en la Facultade de Ciencias Políticas.
En la resolución emitida a mediados de junio, a la que ha tenido acceso Europa Press, la Junta Electoral da por bueno el argumento del gobierno local de que el colegio no tiene espacio para otra mesa, por lo que rechazó la petición de los populares.
Esta mesa fue reubicada en la Facultade de Ciencias Políticas después del cierre de la sede de la Cámara de Comercio, que actuaba como uno de los colegios electorales del Ensanche compostelano.
DENUNCIA DEL PP
La concejala del PP compostelano María Baleato ha denunciado en rueda de prensa, «discriminación» a vecinos del Ensanche compostelano por la decisión de mover mesas electorales como la del Aeroclub de Santiago hasta el Instituto de Bachillerato Rosalía de Castro; y la de la Cámara de Comercio para la Facultade de Ciencias Políticas, en el Campus Sur Universitario.
Baleato ha explicado que el Partido Popular lleva años «reclamando que se arregle esta anómala situación», para lo cual hizo dos reclamaciones en el año 2020 y una más en 2023, destacando, entre otras consideraciones, que «se estaban moviendo mesas en las que los electores llevaban votando desde hace más de 20 años».
La popular ha incidido en que «la sorpresa» fue que, en la primera respuesta, la Xunta Electoral dijo que «los cambios respondían a una propuesta de la oficina del padrón del Ayuntamiento de Santiago, un departamento que dirige una persona que concurrió en las listas electorales municipales por el BNG, tanto en el año 2019 como en 2023».
«A día de hoy, siguen sin corregir esta situación anómala, por lo que también nos gustaría saber cuál fue el grado de participación de esta persona en la toma de decisiones y en el actual bloqueo la una solución que tiene que ser urgente», ha agregado.
Asimismo, Baleato ha denunciado también que lejos de proteger los derechos de los ciudadanos, esta situación «está entorpeciéndolos», ya que «se dificulta el derecho a ejercer el voto por parte de los vecinos afectados».
En vista de la situación, el PP ha optado por presentar una segunda reclamación para que dichas mesas se sitúen en lugares más próximos a su ámbito de influencia, ya que, «con esta modificación, es evidente que el perjudicado es el PP, ya que en esas mesas es la fuerza más votada, independientemente del tipo de elección, general, autonómica o local».
Baleato ha destacado que la Xunta Electoral provincial reconoció en un escrito que «en relación a la mesa que fue trasladada a la Facultade de Ciencias Políticas, se observa que existe una distancia considerable entre la localización del local electoral y el territorio que comprende esta sección?», al tiempo que instaba al Ayuntamiento a «seleccionar un local más próximo a dicho territorio».
En su comparecencia, la viceportavoz ha manifestado «la sorpresa» del Partido Popular al comprobar que, «una vez más y después de las reiteradas reclamaciones», de nuevo para las próximas elecciones autonómicas del 18 de febrero, la mesa de la Cámara de Comercio vuelve a figurar en la Facultade de Ciencias Políticas.
TERCERA RECLAMACIÓN
Así, ha añadido que el 11 de junio del 2023, el PP realiza una tercera reclamación donde solicita la Xunta Electoral Provincial de A Coruña, otra vez, el cambio de la mesa que antes estaba en la Cámara de Comercio y se pasaba a la Ciencias Políticas, cuestión que, a su modo de ver, «debería estar solucionada» tras el pronunciamiento de la junta electoral en junio de 2020.
Así las cosas, ha vuelto a reiterar que «debe solucionarse esta situación», que supone «un agravio comparativo» para los electores de los dos colegios electorales afectados en relación con el resto de los electores del Ensanche.
Para los populares hay un ejemplo que evidencia lo «irregular» de la situación: «¿No resulta ridículo que las monjas de Cluny, teniendo un colegio electoral en su propia residencia, tengan que ir a votar a la Facultade de Ciencias Políticas? ¿No es algo esperpéntico?»
«Es decir, hay un colegio electoral con dos mesas en A Rosa número 13, pero ellas deben trasladarse un kilómetro para votar en la mesa de la Facultade de Ciencias Políticas», ha reprobado, antes de instar al gobierno local, que dirige la nacionalista Goretti Sanmartín, a «servir a los intereses generales».