El Partido Socialista de Galicia ha pedido el apoyo de los grupos de la Cámara gallega para instar a la Xunta a rechazar el «incumplimiento de la Constitución» y el «bloqueo» que sufre el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), una situación que la diputada Paloma Castro ha atribuido a los «intereses partidistas» del PP.

Así lo ha reclamado a través de una proposición no de ley defendida en la tarde de este martes por la parlamentaria socialista en el pleno del Parlamento y que pide también manifestar a los grupos políticos con representación en las Cortes la obligación de cumplimiento inmediato de la Carta Magna.

Paloma Castro, que ha afeado a los populares un bloqueo que «dura ya cinco años» en los que tiene al CGPJ como «rehén» para «chantajear la democracia», ha acusado al PP de vulnerar la Constitución al negarse a renovar este órgano para «controlar a la cúpula judicial con jueces afines».

Castro ha considerado que el PP sobrepasa todos los límites por una «cuestión de pura supervivencia» en un partido que «utilizó las instituciones para financiarse ilegalmente» y que fue calificado de «organización criminal» por la Udef. Un partido, ha añadido, que «tiene más de 300 imputados o condenados por corrupción».

La diputada del PSdeG ha instado a los populares a «asumir» que la aritmética parlamentaria no les permite gobernar y a dejar de «instrumentalizar las instituciones». Además, ha criticado el «cinismo» del partido conservador por «negarse a renovar el gobierno de los jueces» al tiempo que dice que «hay que fortalecer la independencia judicial» con una propuesta de nuevo sistema de elección «falsa, oportunista, electoralista y engañosa».

Además, ha afeado al PP que priorice los «intereses particulares» sin importarle que el bloque «afecte gravemente al funcionamiento de la justicia», impactando directamente en la ciudadanía.

APOYO DEL BNG

En la sesión, el diputado del BNG Iago Tabares, que ha presentado una enmienda que no fue aceptada por los socialistas, ha avanzado el apoyo de su formación a la iniciativa que será votada en la jornada del miércoles al considerar que «por el respeto a los más elementales principios democráticos» urge la renovación de este órgano «previo consenso».

Asimismo, el parlamentario del Bloque ha sostenido que esta renovación debe de ser negociada en las cortes por todos los grupos y no por el gobierno y los grupos. «Tiene que ser una negociación entre los grupos, porque la iniciativa corresponde al Congreso y al Senado», ha subrayado.

POSTURA DE LOS POPULARES

Enfrente, el portavoz parlamentario del PPdeG, Alberto Pazos, ha asegurado que el PPdeG comparte la necesidad de normalizar la situación de la justicia y de que se lleve a cabo un proceso de despolitización. «Pero no compartimos las descaradas falsedades que contiene el texto expositivo de su PNL», le ha trasladado a la parlamentaria socialista.

Asimismo, ha censurado que se responsabilice al PP de la situación. «El PP bloquea cuando está en la oposición y lo equivalente es decir que el PSOE bloquea cuando está en el gobierno», ha dicho Pazos, que se ha preguntado «cómo puede ser» su formación la responsable si para el bloqueo son necesarios 141 escaños, una cifra a la que el PP no llega.

Tras acusar al PSOE de llevar a cabo «dos reformas consecutivas» para atender exclusivamente a sus intereses partidistas, ha sostenido que el Partido Socialista es el que ha mostrado una «desmedida ansia para manejar la justicia a su interés».

«Los partidos mayoritarios incurrimos en errores en el pasado y los debemos asumir pero ningún gobierno ha mostrado la voracidad de Sánchez para convertir la justicia en un instrumento de su poder», ha afirmado.

Además, ha asegurado que el PP pondrá todo lo que esté en su mano para que este país «no se convierta en la república bolivariano de España». «¿Sabe cuál fue la primera reforma de Chávez? Cambiar la mayoría de elección del Tribunal Superior de Justicia de Venezuela, exactamente lo mismo que quieren hacer aquí», ha censurado para mostrar su confianza en que «la sociedad española y las instituciones europeas paren este desatino».