El BNG ha advertido que será «beligerante» para defender que se permita el uso del gallego en el Parlamento europeo y que no permitirá «ninguna rebaja del estatus de reconcomiento» de la lengua propia de Galicia.
Así lo ha manifestado el diputado nacionalista Luis Bará a preguntas de los medios en las comparecencias de prensa tras la junta de portavoces de este martes, jornada en la que el Gobierno, a través del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, priorizase conseguir primero la oficialidad en Europa del catalán y, más tarde, proseguir con la del gallego y el euskera.
Para el Partido Popular de Galicia, que se opone a permitir que las lenguas cooficiales puedan ser empleadas en el Congreso y en el Europarlamento, las intenciones del Ejecutivo central revelan que el PSOE «le da más importancia a una lengua sobre otra en función de los votos para la investidura» de Pedro Sánchez.
«Es lamentable», ha aseverado el portavoz popular en la Cámara autonómica, Alberto Pazos Couñago, que ha dicho desconocer las palabras del portavoz nacional de su partido, Borja Sémper, en las que afirmó que no emplearían las lenguas cooficiales en el Congreso porque sería «hacer el canelo».
Para Pazos Couñago, «hacer el canelo es entrar al debate» en cuestiones que «no ocupan» a la sociedad como, a su juicio, es el empleo de las lenguas cooficiales en las instituciones del Estado. «No vamos a admitir que se use la lengua como herramienta de confrontación y como elemento de uso partidista», ha aseverado el popular.
Por su parte, el portavoz socialista en el Pazo do Hórreo, Luis Álvarez, también se ha escudado en que no conocía las palabras de José Manuel Albares y, por lo tanto, no ha hecho comentarios sobre la intención de priorizar el catalán sobre gallego y euskera a la hora de conseguir su oficialidad en las instituciones comunitarias.
Un asunto, en el que Bará ha remarcado que la formación frenstista no aceptará «ninguna rebaja» ni «trato discriminatorio» con el gallego, por lo que serán «beligerantes» para conseguir que se permita su uso en Bruselas.
«Lo más grave es que el presidente de la Xunta y su gobierno votasen en contra del uso del gallego en el Congreso. No hay ningún caso de ningún gobierno con lengua propia que lo haya hecho», ha apostillado el nacionalista.