La precipitación de los acontecimientos políticos en las últimas semanas tras las elecciones municipales del 28 de mayo, con los ayuntamientos todavía por constituir, y la entrada de lleno en la precampaña electoral para las generales del 23 de julio han dejado este miércoles un reguero de despedidas en la Cámara gallega.
Aunque el jefe del Legislativo, Miguel Santalices, les ha dejado las puertas si cabe «más» abiertas de lo que ya están, los que ya no volverán como diputados son los cinco parlamentarios que este sábado 17 de junio asumirán el bastón de mando de sus respectivos ayuntamientos. Como es tradición en la Cámara, han tenido ocasión de despedirse, unos minutos que aprovecharon para revelar sus emociones, reconocer el trabajo de todos y, pese a las disputas políticas, sellar la paz con sus oponentes políticos.
En una legislatura marcada por la pandemia, en las que han estado buena parte de los meses separados por mamparas y cumpliendo estrictas normas de prevención, incluida la toma de temperatura corporal, se despiden a un año como mucho de las elecciones autonómicas Manuel Lourenzo (BNG), futuro alcalde de Soutomaior; Marta Nóvoa (PPdeG), futura alcaldesa de San Cibrao; José Manuel Rey Varela (PPdeG), futuro alcalde de Ferrol; Ovidio Rodeiro (PPdeG), próximo regidor de Boqueixón; y Daniel Vega, que asumirá la Alcaldía de Ribadeo tras la victoria del PPdeG.
Dejando en mayor o menor medida entrever la emoción por la despedida, todos ellos invitaron a los compañeros de la Cámara a visitar sus respectivos ayuntamientos, no sin dejar algunos ‘recados’.
Así pues, Rey Varela avisó de que Ferrol seguirá necesitando la colaboración del Parlamento para salir adelante, Daniel Vega aseguró que «no se van a olvidar» de él los conselleiros porque les llamará a la puerta para reclamar para su ayuntamiento inversiones y Manuel Lourenzo, en clave electoral, aprovechó para equiparar la conquista del municipio tradicionalmente gobernado por el PP para afirmar que será un preludio para la Xunta con Ana Pontón.
GUIÑOS Y PROCLAMAS
Más allá de guiños políticos y proclamas de precampaña, Manuel Lourenzo se declaró «fan» de los discursos de José Manuel Balseiro, el mariñano popular al que le aseguró que le seguirá su carrera parlamentaria a través del ‘streaming’, lo que no pasó desapercibido para las bancadas de uno y otro color.
Los diputados populares tuvieron palabras de agradecimiento a la confianza recibida tanto por el actual presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, como por su antecesor y presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, al tiempo que hubo reconocimientos a sus compañeros de bancada y, en especial, al «profesor Puy».
Y es que, el portavoz parlamentario del PPdeG que llegó a la portavocía del grupo en los momentos más duros de la crisis económica y firmó acuerdos legislativos y de reglamentarios en la Cámara como recorte de sueldos de los diputados y las medidas de transparencia que permiten conocer las actividades y bienes de sus señorías, también ha vivido este miércoles su propia despedida.
LOS FOCOS DE LAS DESPIDAS
Puy se incorpora a las listas del PP al Congreso para formar equipo con Feijóo, quien le encomendó durante una década capitanear el grupo parlamentario, una tarea que fue reconocida también por sus oponentes en la Cámara, de quién también «aprendieron», como expresaron este miércoles.
Así, aunque el diputado popular todavía no se ha despedido y como el todavía vicepresidente primero, Francisco Conde, permanecerá en el Pazo do Hórreo hasta pasadas las elecciones generales, los focos mediáticos lo señalaron también como uno de los protagonistas en una jornada en la que, en este caso ya de forma definitiva, la que ha sido conselleira de Mar en los últimos 14 años ha dicho, entre lágrimas, adiós.