El portavoz del PP, Borja Sémper, ha acompañado este jueves al candidato popular en la capital gallega, Borja Verea, quien se ha visto ganador en las próximas municipales del 28 de mayo, frente a un proyecto de «pasado» encabezado por el socialista Xosé Sánchez Bugallo y que ahora, subrayó, tiene forma de «tripartito de perdedores» en referencia a las otras dos fuerzas de la izquierda con representación en la corporación, BNG y Compostela Aberta.
Sémper, que en la noche del miércoles 17 de mayo, festivo autonómico con motivo de las Letras Galegas, acudió a la carpa del pulpo en la capital gallega con el presidente del PP de Galicia, Alfonso Rueda, se ha quedado este nuevo día de fiesta en la capital gallega, celebración de la Ascensión, para darse un «baño de compostelanismo» en el día «más picheleiro», en palabras de su tocayo y candidato a la Alcaldía.
Acompañado en esta jornada también de la secretaria general del PP gallego, Sémper ha pasado la mañana del jueves junto Borja Verea en la capital gallega, en la que el cabeza de lista por Santiago ha apelado a las encuestas para verse ya «casi» como regidor, consciente de que necesita una mayoría absoluta.
«Estamos convencidos de que va a ser el próximo alcalde de Santiago», ha proclamado el portavoz del PP nacional en declaraciones a los medios en la Praza de Praterías, antes de iniciar un recorrido por las calles compostelanas y acabar en la carpa de Santa Susana para comer el tradicional pulpo. En su intervención, lamentó que la política está «discurriendo un camino que expulsa a los ciudadanos normales de la política» y en la que hay «mucho grito e insulto y muy poco de los temas que verdaderamente importan a los ciudadanos».
Por ello, ha incidido en que, en la cita electoral del próximo 28 de mayo, los ciudadanos «tienen la oportunidad de pronunciarse sobre los problemas que más le afectan» y ha destacado que tienen la ocasión de apoyar a candidatos como Borja Verea que «no se conforma, sino que apuesta por un Santiago mejor». Ello, dijo, sin «abstraerse» de que estamos en «un año electoral» con un horizonte de las generales y en el que es «muy importante que una ciudad como Santiago tenga un futuro mejor, con un alcaldía renovada porque va a ser el inicio del cambio en España».
Sémper ha enfatizado que «España no está condenada a tener una mala política o un mal gobierno, a estar enfadados». «No hemos venido aquí para ser oposición, para ser oposición en Santiago, sino para alcanzar el Gobierno y mejorar la condición de vida de los ciudadanos», ha proclamado, antes de «convocar a la gente que piensa diferente, gente que reza a dioses diferentes y gente que ama de manera diferente y que ha votado de manera diferente en el pasado».
«AUTÉNTICO BAÑO DE COMPOSTELANISMO»
En este sentido, Borja Verea ha manifestado que en su equipo están «muy contentos» porque las encuestas dicen que «van a ganar las elecciones con mucha claridad, con mucha diferencia con los demás». «El cambio ya es imparable en Santiago y quedan diez días para empezar a gobernar, para llevar a Santiago al siglo XXI», ha remarcado.
En declaraciones a los medios, Verea ha observado que «la gente dice claramente» que él sea «el alcalde» y que sea su equipo el que gobierne, un «gobierno que lleve a Compostela al siglo XXI». «No quiere un candidato del pasado y sin ideas y ahora en forma de tripartito de perdedores», ha convenido.