La ausencia un año más de la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha vuelto a marcar la jornada de comparecencias de los presidentes provinciales en la ronda de presentaciones ante la Comisión de Presupuestos de la Cámara autonómica.
La negativa de la mandataria socialista a acudir a la Cámara, algo que se repite desde 2017, ha sido comentada a lo largo de las tres comparecencias que sí han tenido lugar y que ha abierto el coruñés Valentín González Formoso.
Precisamente, el PP, de la mano de su diputado Alberto Pazos Couñago, ha señalado al también secretario xeral del PSdeG por «defender» que Silva «se salte la ley» al no presentarse en la Cámara, algo que ha tachado de «vergonzosa costumbre que define su talante democrático».
«Después de años en los que Gonzalo Caballero criticaba la ausencia con la boca pequeña, hoy Formoso la defiende», ha aseverado Pazos Couñago durante el turno de cinco minutos para los grupos abierto en la comisión tras la comparecencia del presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar.
Según Pazos Couñago, la actitud de Silva, a la que ha acusado de gobernar de forma «caciquil» y «discrimatoria» hacia los «municipios pequeños» y los no gobernados por el PSOE, goza de la «complicidad» del BNG.
Antes del popular, la diputada socialista Leticia Gallego ha defendido que Silva no acuda por respeto al principio de la autonomía local a presentar en la Cámara el «presupuesto más ambicioso de la historia de la institución».
Por su parte, Manuel Lourenzo (BNG) ha lamentado que el debate tenga aires de «deja vu» y ha echado en cara a socialistas y populares que actúen con «camaleonismo», defendiendo unos argumentos u otros «en función de quién sea el que no comparece», en alusión a los años en los que eran los presidentes del PP los que se negaron a acudir a la Cámara.