La subdelegada del Gobierno en Pontevedra, Maica Larriba, ha presidido este miércoles la Xunta Provincial de Seguridade, en la que se analizaron las cifras de delincuencia e infracciones penales registradas en la provincia durante los meses de julio y agosto, donde ha subrayado que la okupación bajó un 10% en lo que va de año, en comparación con el mismo periodo de 2021.
Según Larriba, os datos en general son «buenos», pese a que se ha registrado un «ligero aumento» de los delitos leves, talos como hurtos, daños o lesiones. «Este aumento se observa en todas las ciudades de la provincia y está, en muchas ocasiones, ligado al ocio nocturno», ha apuntado, según recoge la Subdelegación en un comunicado.
Pese a ello, en los meses de julio y agosto, en comparación con el mismo periodo de 2019 (último año antes de la llegada de las restricciones por la pandemia), se contabilizó un descenso de los robos con fuerza, tanto en viviendas como en establecimientos, y de los delitos contra la libertad sexual.
En cómputo global de las infracciones penales, estas descienden un 5,37% en las principales ciudades de la provincia, pero sufren un «pequeño repunte» en el ámbito territorial de la Guardia Civil (villas y pueblos).
OKUPACIÓN
En este encuentro, al que han acudido responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Pontevedra, la subdelegada del Gobierno analizó junto con los mandos policiales las cifras de okupación, «que evidencian que este no es un problema en la provincia», ya que en lo que va de año bajaron un 10% respecto a 2021, con Vigo a la cabeza, con una caída del 47%.
A este respecto, Maica Larriba ha querido mandar un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos, «ya que las okupaciones no son significativas en la provincia, donde este tipo de infracciones se producen en un 70% en viviendas abandonadas o propiedades vacías pertenecientes a bancos o grandes tenedores». También ha explicado que muchos de los okupantes son personas en riesgo de exclusión social y vulnerabilidad.
DATOS POR CIUDADES
La subdelegada del Gobierno ha detallado las cifras de delitos registrados en cada una de las cuatro ciudades de la provincia, indicando que en Pontevedra descendieron los delitos contra la libertad sexual y los robos con fuerza en viviendas y establecimientos. En este último caso, con una caída de más del 90% este verano, pese a que se produjeron 38 hurtos en julio y agosto, algo más que en los mismos meses de 2019.
En Vigo, bajaron un 6% los delitos contra la libertad sexual y un 15% los robos con fuerza en viviendas o un 80% los robos con fuerza en establecimientos.
Larriba ha señalado que en Vilagarcía de Arousa no se produjo ningún delito contra la libertad sexual durante julio y agosto de este año y ha valorado el descenso del 50% de los delitos de sustracción de vehículos. En Marín bajaron a la mitad los robos con fuerza en establecimientos, pero aumentaron los robos en vivienda con hasta cuatro entre julio y agosto, mientras que en 2019 solo se había producido 1.
INCENDIOS
Entre otros datos, Larriba ha lamentado los datos relativos a los incendios forestales en la provincia, que dejaron más de 2.260 hectáreas quemadas, tras registrarse 392 fuegos este verano.
«Tristemente, estas cifras son muy superiores a las registradas en los mismos meses del año pasado, cuando ardieron tan solo 21,75 hectáreas y se produjeron 126 fuegos», ha añadido la subdelegada. La Guardia Civil investigó a nueve personas y realizo una detención relaciona con los incendios de este verano en la provincia.