El BNG ha mostrado su rechazo a la aprobación de un crédito extraordinario en el Consejo de Ministros para aumentar en este año el gasto militar en 1.000 millones de euros y avisa de que ello irá «en detrimento» de las políticas sociales.
En un comunicado remitido a los medios, el diputado del Bloque en el Congreso, Néstor Rego, denuncia que esto implica reducir los recursos disponibles en cuestiones tan esenciales como políticas sociales, servicios públicos, inversiones o promoción del empleo. Además, entiende que el compromiso con la OTAN de aumentar hasta el 2% del PIB el gasto militar hipotecará la capacidad de desarrollar políticas a favor de las mayorías sociales precisamente en un momento de grave crisis social y económica.
«Cuando hay centenas de millares de personas que lo están pasando realmente mal –millones en el conjunto del Estado– es un despropósito dedicar 1.000 millones de euros de los recursos públicos, siempre limitados a aumentar el gasto militar», sostiene Rego, que asegura que la prioridad debería ser las políticas de protección social, de desarrollo económico y de fomento del empleo.
El diputado nacionalista ha asegurado que no puede llamarse progresista un gobierno cuya prioridad es aumentar la compra de armamento por encima de atender las necesidades básicas de la población en un momento de extremas dificultades por la crisis de precios.
«Parece que Pedro Sánchez prefiere atender el mandato de la OTAN y sus intereses del complejo militar-industrial de los Estados Unidos que los intereses de las mayorías sociales y de los pueblos del Estado», señala Rego, que recuerda que la propia OTAN dijo que «se aseguraría» de que el Gobierno español cumpliese.
«Destinar en un plazo de ocho años entre 10 y 12.000 millones de euros a aumentar el gasto militar implica hipotecar la capacidad de desarrollar políticas sociales y económicas para proteger y mejorar la calidad de vida de las mayorías sociales», insiste Rego, que denuncia el «sometimiento» de Sánchez y del Gobierno español «a los intereses del imperialismo norteamericano».
Néstor Rego advierte que ese compromiso afectará de forma importante a los presupuestos del Estado en los próximos años y, por tanto, también a las inversiones en cuestiones esenciales como la mejora de las infraestructuras y los servicios ferroviarios.
Por todo ello, insiste en la importancia de que Galicia tenga capacidad de decidir de forma soberana en función de los propios intereses. «Cuando Galicia tenga soberanía también tendrá la capacidad de establecer las prioridades políticas necesarias para desarrollar sus potencialidades económicas», subraya.