El portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, ha condenado el empujón que el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, dio a una mujer sindicalista en el marco de la huelga del transporte urbano el pasado martes 3 de mayo.
En todo caso, más allá de decir que se trata de una acción «reprobable», la cual ha condenado, ha remitido el resto de «cuestiones municipales al ámbito local», un partido y grupo en que «confía» en que tomará las decisiones adecuadas. «Cualquier actuación», siguió, debe decidirla la dirección de Ourense, que «saben lo que tienen que hacer».
Preguntado por si, teniendo en cuenta que políticos han presentado su dimisión por multas, es «admisible» que un cargo público se mantenga en el cargo tras empujar a una persona; Pedro Puy ha esquivado la cuestión asegurando que «condena» los hechos y que plantear si él dimitiría en caso de haberlo hecho, son «hipótesis». En todo caso, aclaró que «no es su forma de ser».
«Hay decisiones que corresponden tomar al grupo municipal y al PP de Ourense», ha insistido, ciñendo la cuestión a las lindes locales. Preguntado por si se corre el riesgo de que se llegue a finales de mayo sin decisiones y que quede desactivada la posibilidad de una moción de censura y si, por lo tanto, urgen las actuaciones, Puy ha remitido «todas estas preguntas al PP de Ourense y al grupo municipal».
Así, Puy se ha situado como un «observador» externo y ha dicho que, desde esa óptica, «están actuando con bastante responsabilidad». De hecho, y frente a las críticas de la oposición por apoyar el gobierno de Jácome y que se mantenga tras lo ocurrido, el diputado popular ha remarcado que «el resultado electoral no era fácil y que varias alternativas pasaban por el señor Jácome.
«CUESTIÓN DE POLÍTICA LOCAL»
«Insisto, es una cuestión de política local, me uno a la condena a la acción y reprobación del alcalde», ha subrayado Puy, quien ha indicado que «como observador externo» su «impresión» es que el PP está haciendo «un enorme esfuerzo» por mantener la acción de gobierno que «no tiene que ver» con otras actitudes.
No ha querido adelantar si cuando se debata una eventual reprobación en el Parlamento, el PP la apoyará, partido del que ha destacado que ha trabajado «con una única directriz» que el gobierno local, que está en «una situación compleja» debido el resultado electoral, que es dar «estabilidad» a un ayuntamiento, frente a las actitudes de la anterior legislatura cuando gobernaban los populares.
Pedro Puy, que ha mostrado su «confianza» en el partido en Ourense, que «tienen capacidad de valorar» todas las cuestiones. «Yo estoy en la política autonómica», ha dicho, tras indicar que se une a la condena de sus compañeros e insistir en que confía en que tomarán la decisión adecuada «en un contexto muy complicado, que no es culpa del PP».
«DEJAR DE APOYAR»
Por su parte, la viceportavoz del BNG, Olalla Rodil, ha manifestado que el PP «tiene que dejar de apoyar» a quien mantiene «una actitud inadmisible», el alcalde de Ourense.
«El PP es responsable de lo que está pasando desde las últimas elecciones municipales en Ourense. Fue quien puso y quien sostiene a día de hoy a un alcalde que acabamos de verlo, sin el mínimo pudor, cómo es, a cara descubierta, con una actitud absolutamente violenta y autoritaria», ha manifestado.
Así las cosas, ha concluido que esa actitud es «inadmisible en un sistema democrático y en una sociedad avanzada como es la gallega». «Jácome no puede seguir ni un minuto más en la alcaldía de Ourense y el PP tiene que dejar de apoyar a quien apoyó con una actitud absolutamente inadmisible en un sistema democrático», ha sentenciado.
Fuera de la Cámara, el secretario xeral del PSdeG, Valentín González Formoso, ha instado al PP a alcanzar un acuerdo y «evitar» que Pérez Jácome «pueda seguir representando a la ciudadanía» de Ourense.