El portavoz parlamentario del PSdeG, Luis Álvarez, ha asegurado que al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se le cayó la «careta» con el voto en contra de su formación al decreto presentado por el Gobierno por medidas contra la crisis.
«Es igual que Casado: vota lo mismo y hace las mismas cosas. Representa al PP del no, el PP de la caverna y de la involución», ha afirmado en una rueda de prensa ofrecida este viernes en la Cámara gallega.
Luis Álvarez ha sostenido que la postura del jueves demuestra que «el PP y Vox son dos fuerzas políticamente siamesas, hacen lo mismo y actúan igual».
Así, ha lamentado que el PP se vuelva a «alinear con la extrema derecha para tumbar medidas que redundan en el bienestar de la gente y que fueron negociadas para mitigar el impacto de la guerra de Putin y de la escalada de precios».
Lo mismo, ha continuado, que con la reforma laboral, cuando «PP y Vox aplaudían juntos pensando que acaban con una medida concebida para ponerle coto a los contratos temporales o por horas, demostrando que no quieren estabilidad laboral ni contratos indefinidos».
Según ha indicado, lo hicieron de nuevo el jueves cuando «las dos fuerzas políticamente siamesas, junto a extraños invitados como ERC o Junts, sintonizaron para intentar tumbar un decreto por el que esperaban los ganaderos, los pescadores, los transportistas o los autónomos, todos ellos fundamentales para la economía gallega».
CONSECUENCIAS
«Su no», ha dicho, «provocaría que todos tuviésemos que pagar el gasóleo 20 céntimos más caro, impediría bajar a la mitad el IVA de electricidad, negaría el aumento del 15 por ciento en el IngresoMínimo Vital, frenar la subida de los alquileres o no existiría una inyección de 450 millones para los transportistas, 363 para los agricultores y 68 para la pesca».
El dirigente socialista ha sostenido que fue «un triste inicio para Feijóo», que «muestra claramente que quien sigue marcando las política del PP es Díaz Ayuso», después de votar que no a pesar de que el gobierno sí atendiera su petición de tramitar el decreto como proyecto de ley.
Así, ha advertido de que fue su «dedazo de última hora», lo que optó por el no en las votaciones cuando «todo el grupo parlamentario del PP asumía que se iba a abstener».