La Organización Galega de Comunidades de Montes Veciñais en Man Común ha lamentado la negativa expresada por el grupo del PP en el Parlamento gallego a retirar la reforma legislativa anunciada por el Gobierno autonómico que, según este colectivo, abre la puerta a «privatizar» los montes vecinales.
Este miércoles, una delegación de la organización ha mantenido una serie de encuentros con los grupos parlamentarios del Legislativo autonómico, a los que han trasladado su preocupación por la nueva ley aprobada por el Ejecutivo gallego la pasada semana, que saldrá a consulta pública próximamente.
Esta reforma, que actualizará un texto del año 1989 y que la Xunta ha justificado como un intento por combatir el «abandono del rural y la infrautilización de los terrenos forestales, abre la puerta a la «privatización» de los montes, según denuncia la organización de comuneros.
La entidad trabaja en la recogida de firmas para una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que pretende respaldar esta figura de propiedad y considera que la norma planteada por la Xunta persigue «privatizar los montes en mano común para entregárselos a terceros, o dicho de manera más clara, para robarle los montes vecinales a los comuneros, que es su único y legítimo titular».
Así lo ha trasladado el presidente de la organización, Xosé Pereira, que ha trasladado que, en el encuentro con el PP, el grupo que sustenta con su mayoría absoluta al Gobierno autonómico confirmó que no modificarán la propuesta legislativa «porque se trata de una reforma impulsada por el Gobierno gallego y no por el propio PP».
Los comuneros recuerdan que su ILP fue anunciada tras una concentración celebrada a las puertas del Parlamento gallego en protesta por los cambios normativos incluidos en la ley de acompañamiento a los presupuestos que afectan a los montes en mano común.
«Ante esto, y aplicando unos mínimos principios democráticos, parecería lógico que el PP retirara su propuesta y esperara a que se iniciara la tramitación de ley de montes vecinales propuesta en la ILP», resalta la organización, que agradece el apoyo manifestado por los grupos de la oposición, BNG y PSdeG.
BNG PIDE «UN MONTE FUNCIONAL»
Por su parte, la portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, ha defendido la necesidad de impulsar en Galicia «un nuevo modelo de monte funcional», que sea «respetuoso» con el medio ambiente y que esté ajustado a las características del territorio.
La líder frentista participó en el encuentro con la organización de comuneros, a los que expresó su apoyo a la ILP en defensa de los montes vecinales, una figura de propiedad que ve «fundamental» para adoptar un «cambio de modelo» en la ordenación forestal.
Así las cosas, ha manifestado su oposición a los cambios normativos avanzados por la Xunta, que ve «una agresión» al monte comunal porque está «destinada» a permitir la «privatización» de estos espacios para ahondar «en una política de reforestación y eucaliptización en Galicia».