La inminente sucesión de Alberto Núñez Feijóo al frente de la Xunta, una vez que se haga con las riendas del Partido Popular y en los plazos que marcará cuando decida su dimisión como jefe del Ejecutivo autonómico, ha marcado también este martes las ruedas de prensa posteriores a la junta de portavoces en el Parlamento de Galicia, en las que también ha sonado el nombre del vicepresidente primero, Alfonso Rueda, como sustituto ahora al frente del Gobierno, como sugirió el barón ourensano, Manuel Baltar.

«El señor Baltar es un observador privilegiado de la política gallega y por lo tanto todos debemos prestar atención a lo que dice, que como acabo de decir, ocupa en los procesos decisorios del Partido Popular un lugar mucho más preeminente que este portavoz», ha contestado el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, a la pregunta de si él también se incluye en el plural marcado por el presidente de la Diputación de Ourense cuando habló –en una entrevista en Onda Cero– de que «todos parecen coincidir» en que Rueda está en situación «de preelección» para asumir ahora la Xunta.

«Y dicho esto, ya saben que soy poco jugador y simplemente me remito a que, si hay un cierto grado de coincidencia en todas las declaraciones, por algo será; pero también insisto en que somos un partido democrático y, por lo tanto, las decisiones se adoptarán de acuerdo con los canales previstos para este tipo de actuaciones», ha apostillado, en respuesta a la misma pregunta.

Al margen de la sucesión en la Xunta, el PPdeG deberá abordar en el futuro el relevo en el partido, puesto que Feijóo dejará de ser su presidente en próximos días para convertirse este fin de semana en líder nacional. A este respecto, Pedro Puy ha mostrado su «convicción» de que se «van a hacer las cosas bien» y de que el partido tuvo «procesos más intensos» de sucesión que el que viene ahora, citando explícitamente la propia sucesión de Fraga (al que siguió Feijóo) y la de Albor tras la moción de censura.

«Ya sabe que de la lectura de hacer las cosas bien hay óptimos y subóptimos. Lo importante es que acertemos con lo óptimo y yo lo que veo es la máxima disposición por parte de todos los que participarán en este proceso a hacerlo con el mecanismo que esté más próximo de lo óptimo», ha contestado, al ser preguntado sobre si «hacerlo bien» pasa por la elección en un comité ejecutivo o la celebración de un congreso.

«Y poco más puedo decir, porque quieren que hagan predicciones de futuro que ni siquiera están en esa fase. Estamos en la fase de acompañar al presidente Feijóo en el Congreso de Sevilla, de apoyarlo, votarlo, elegirlo y, a partir de ahí, empezarán a correr los plazos», ha subrayado.

En contestación a las varias preguntas sobre esta cuestión, y también ante las críticas de la oposición al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, por estar «a medio gas», Puy ha negado cualquier «situación de interinidad» en Galicia, al respecto de lo que ha insistido en que «no hay vacante» en el Gobierno hasta que entre en funciones, algo que ocurre con el momento de la dimisión. Es más, ha dicho que el Gobierno de Galicia «está mucho más activo que el de España» y «trabajando todos los días en los problemas que surgen».

«Somos un partido democrático y no tengo ninguna señal de que no sea así», ha apuntado Puy, quien ha afirmado que «aprecia» en «todos los compañeros» un «sentimiento de responsabilidad, de hacer las cosas bien y un proceso ejemplar» y «garantizando la estabilidad» de la Xunta.

SUSTITUCIÓN DEL LIDERAZGO

Puy ha reconocido que la marcha de Feijóo implica la «dificultad» de sustituir «un liderazgo indiscutible», pero ha convenido que en el PP «hubo procesos que fueron más intensos», algo que atribuye a, precisamente, la «responsabilidad» que aprecia en todos los que tienen presencia en algún cargo. Así, ha rememorado la sucesión de Gerardo Fernández Albor tras la moción de censura y la sucesión del presidente fundador, Manuel Fraga. «Las circunstancias son propicias para que haya un relevo ejemplar», ha aseverado.

El portavoz parlamentario puso de relieve que es Feijóo el que tiene que activar –dijo que lo hará a partir de la próxima semana– el proceso de sucesión en la Xunta cuando dimita, mientras que el partido entra en una nueva fase –que puede ser interina durante meses–. «No estoy en fechas, sigo con la convicción de que vamos a hacer las cosas bien, desde el presidente hasta los últimos» responsables, ha afirmado.

«EL PROCESO PUEDE HACERSE EN PLAZOS CORTOS»

Puy ha explicado que en el momento en que haya una vacante en la Presidencia de la Xunta, el presidente del Parlamento volverá a escuchar a los portavoces de los grupos y convoca el pleno de investidura, como dictan las normas parlamentarias.

«Todo este proceso se puede hacer en plazos relativamente cortos, los periodos no tienen que ser muy largos», ha sentenciado.

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha afirmado este martes que «a partir de la primera semana de abril», inmediatamente después de ser elegido presidente del PP de España, prevé «empezar a concretar» cuál es «la fórmula elegida» para su sucesión.

LA OPOSICIÓN CRITICA QUE ESTÉ A «MEDIO GAS»

Los grupos de la oposición, a través de la viceportavoz del BNG, Olalla Rodil, y del portavoz socialista, Luis Álvarez, no se han pronunciado sobre la eventualidad de que sea Rueda quien asuma las riendas del Gobierno de la Xunta, pero sí han urgido un relevo al frente de la Xunta frente a una situación que, en palabras de la nacionalista, sitúa al presidente «a medio gas».

«Galicia no merece un presidente a medio gas, a media jornada, que se levanta como candidato del PP y se acuesta como presidente de la Xunta. Necesita una persona al frente de la Xunta que esté centrado en los problemas reales», ha manifestado Rodil al se preguntada en la rueda de prensa posterior a la junta de portavoces, en la que ha lamentado la situación de «interinidad», a la que pide poner fin «por el bien de todos» y porque Galicia no lo «merece».

La viceportavoz nacionalista ha rechazado pronunciarse sobre sucesores (en concreto al ser preguntada por Rueda), pero ha dicho que «sea una u otra persona», Galicia necesita «una Presidencia centrada en los problemas de los gallegos», porque «las consecuencias que deja (Feijóo) son las de un país peor en todos los baremos e ítems» frente a cuando llegó a San Caetano.

«La situación de interinidad es evidente, tenemos un gobierno desaparecido, hasta desde el punto de vista de su presencia pública. No está preocupado por los problemas de Galicia, sino por los orgánicos del PP, por lo tanto, esta situación de tránsito tiene que resolverse cuanto antes», ha urgido Luis Álvarez, quien ha sentenciado que «en el peor momento de Galicia, tenemos un gobierno que no está actuando».

El portavoz socialista ha señalado que «la decisión de dimitir» como presidente «depende exclusivamente» de Feijóo, y por ello ha «apelado a la sensibilidad y responsabilidad» para «sacar» de esta situación a Galicia. Así, ha considerado que debe de ser «cuanto antes» y mientras esté al frente de la Xunta, actúe de manera «solvente» como él se presenta.

Por otro lado, en cuanto a la petición de que mantener un encuentro con el secretario xeral del PSdeG, Valentín González Formoso; el portavoz parlamentario socialista se ha ofrecido a acudir «en persona» a San Caetano para recibir la «comunicación» para fijar ese encuentro.