La última confrontación dialéctica del primer Debate sobre el Estado de la Autonomía de este mandato ha ratificado las posiciones políticas del partida: un BNG y un PSdeG muy críticos con la gestión del Ejecutivo que lidera Alberto Núñez Feijóo frente a un PP que considera que la oposición está «ensimismada» en sus propios procesos y que «no estuvo a la altura» ni siquiera en los momentos más graves de la pandemia.
Así, en su último turno, el viceportavoz socialista, Pablo Arangüena, ha afeado al PPdeG que no quiera moverse «de su campaña propagandística de una Galicia feliz» que «no existe». «Si se cumpliese todo lo que dice Feijióo, Galicia sería una potencia mundial y a nosotros nos gusta mucho Galicia pero lamentablemente no lo es», ha zanjado.
También ha instado al PPdeG a «dejar el discurso bronco e indocumentado» en el que, en la línea «con Vox», identifican al Gobierno que dirige Pedro Sánchez «como un enemigo exterior» de Galicia. «No lo es, es un montaje y constituye un relato contraproducente. Gobiernen Galicia», ha instado.
La nacionalista Olalla Rodil ha iniciado su intervención preguntándose por qué el popular Miguel Tellado se ha mostrado «tan enfadado» y le ha comparado con el «Pitufo Gruñón», lo que ha provocado las molestias de las bancadas populares. «Viene aquí ha reñirnos por pensar distinto y, sobre todo al Bloque, por querer que Galicia crezca y tenga más oportunidades», ha lamentado.
Finalmente, Rodil ha esgrimido que el PPdeG es el único que llega a la Cámara «con el piloto automático y siempre con los mismos mantras». Con un «catecismo», ha dicho, sustentado en «dos mandamientos»: «siempre el PP por delante de todo» y «culpar al Bloque de todas las cosas». «Y sumaría otro: el mundo empezó en 2005», ha agregado, en referencia a las constantes críticas populares a la etapa del gobierno del bipartito.
Rodil también ha esgrimido que el BNG seguirá «defendiendo a Galicia» y sin aceptar de forma acrítica el discurso popular. Todo ello sin evitar algún recado aparentemente dirigido a los socialistas: «Y quien quiera hacer de comparsa al PP, que siga también».
«EL QUINTO MANDAMIENTO ES NO MATARÁS»
«El quinto mandamiento es no matarás, coménteselo a sus compañeros de Bildu», ha replicado Tellado, quien ha insistido en que el Bloque «es el pasado, no el futuro», y que, pese a que Ana Pontón «se erija en la suma sacerdotisa de la renovación es la diputada (mujer) más veterana de la Cámara». «Diecisiete años pisando moqueta, cuando entró en el Parlamento sus familiares no la pudieron felicitar por whatsapp porque no existía», ha afeado.
También se ha reafirmado en sus críticas al Gobierno central y ha cargado contra «una oposición ensimismada» en sus propios procesos orgánicos, que ha comparado con «El juego del Calamar». «Lo único que preocupa a Pontón es Pontón, y a Caballero, Caballero», ha zanjado.
Frente a una oposición que «no estuvo a la altura, que no apoyó el Gobierno ni arrimó el hombro cuando hacía falta», ha reivindicado que el PPdeG será siempre «leal a Galicia» porque «Galicia lo merece todo». «Nos dejamos la piel y la vida en el trabajo», ha concluido, en un debate marcado por el fallecimiento repentino del conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, mientras trabajaba en la Xunta.