La presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva, ha criticado a la Xunta de Galicia por su «forma caciquil y clientelar de gobernar», tras anunciar asfaltados la delegada territorial en Pontevedra.
Según ha dicho este viernes la presidenta provincial en rueda de prensa, «todos los anuncios, todas las reuniones que está haciendo la Xunta de Galicia, comenzando por su vicepresidente y continuado por todos los conselleiros y conselleiras, son para anunciar inversiones en los ayuntamientos del PP».
Al respecto, ha asegurado que «ya es intolerable todo lo que está ocurriendo» y se ha referido a la actuación de la delegada territorial de la Xunta de Galicia en Pontevedra, Luisa Piñeiro, que esta semana anunció asfaltados en caminos municipales de Lalín, Rodeiro y Dozón, todos ellos gobernados por el PP, y previamente había anunciado nueve actuaciones, siete de ellas en municipios con alcalde o alcaldesa popular. También acudió a Focarei donde se hizo «fotos con la oposición para anunciar cribados» para la detección de la covid-19, ha criticado.
Carmela Silva ha dicho que éstos son ejemplos de esta semana pero «hay muchos más», por lo que concluye que «no hay derecho a estas cosas, no se puede funcionar así». «El caciquismo y el clientelismo tiene que ser erradicado de la política», ha sentenciado.
La mandataria socialista ha insistido en que el gobierno que preside Alberto Núñez Feijóo «solamente invierte muy mayoritariamente en los ayuntamientos donde hay un alcalde o una alcaldesa popular» y ha puesto como ejemplo el reciente anuncio del conselleiro de la Educación de obras en colegios de Mos.
Unas reformas que la presidenta provincial apoya, pero pregunta si también se van a mejorar los de Cuntis, Vilagarcía, Pontevedra, Redondela, Vigo, A Illa de Arousa, Silleda o Forcarei, con gobiernos de izquierda.
Frente a este comportamiento «indignante» por parte de la Xunta, Carmela Silva ha exigido al Gobierno autonómico que «haga exactamente lo mismo» que hace la Diputación de Pontevedra, «una administración que reparte los recursos con criterios objetivos», ha dicho.
Por último, ha recordado que más de 700.000 personas de la provincia de Pontevedra viven en municipios con alcaldes que no son del PP, mientras que los ayuntamientos gobernados por ese partido solo representan a poco más de 200.000 personas, de modo que la Xunta «tiene que cambiar», ha sentenciado.