El dibujante Kiko da Silva ha presentado una demanda contra el presidente del PP de la ciudad de Pontevedra, Rafa Domínguez, porque hace casi un año insinuó que el Ayuntamiento, gobernado por el BNG, le había adjudicado «a dedo» y por «amiguismo» –el ilustrador participó en la candidatura nacionalista para las últimas elecciones generales– el diseño de la campaña del Carnaval de 2020.
A través de un comunicado, Domínguez confirma la recepción de esta demanda, de la que dice «no le amedrenta», y lamenta «profundamente la judicialización de la vida política local». En este sentido, lanza una advertencia al Bloque: «A los juzgados podemos ir todos».
«Lo que no pueden pretender es tratar de obstaculizar nuestro trabajo, y menos cuando han sido los pontevedreses los que nos han elegido para llevar a cabo una función de control sobre lo que acontece en el Ayuntamiento», añade el líder del PP local.
De hecho, Rafa Domínguez avanza que los populares «sacarán más contratos» que ya están «estudiando al detalle» e insiste en que ni le «acobarda» esta demanda ni le «intimida este tipo de estrategias».
«Su intención es que dejemos de arrojar luz sobre más adjudicaciones como esta (a Kiko da Silva), una labor que entra dentro del cuadro de funciones que como oposición tenemos que realizar. Repito: al juzgado podemos ir todos en cualquier momento», insiste el presidente del PP local.
DA SILVA REIVINDICÓ LEGALIDAD DEL CONTRATO
El líder popular ha recibido la demanda casi un año después de sus denuncias de «amiguismo» entre BNG y el ilustrador, de quien dijo además que era «miembro» de la formación nacionalista. Tras estas palabras de Domínguez, Kiko da Silva desmintió en sus redes sociales que fuese afiliado del partido –aunque sí acudió como su número 4 por Pontevedra en las generales del 2019– y avanzó que acudiría a la justicia.
En esa misma publicación, el dibujante reivindicó su «larga carrera profesional» y defendió la legalidad del contrato para la campaña del Carnaval de 2020 por 4.400 euros, al tiempo que criticó que «lo que les molesta (al PP) es que ideológicamente sea simpatizante del BNG».
No en vano, Kiko da Silva también ironizó con que los populares no llevasen estas denuncias al Ayuntamiento vecino de Marín, donde sí gobiernan, ya que un año atrás le había encargado la elaboración de una banda diseñada.