El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Vigo ha tildado de «cacicada» la prórroga de la concesión del servicio de saneamiento y abastecimiento a Aqualia, y ha censurado que el gobierno local no ha dado cuenta del destino de las inversiones que debía hacer la empresa.
En una rueda de prensa, el portavoz ‘popular’, Alfonso Marnotes, ha recordado que esta segunda prórroga del contrato (la anterior fue aprobada en 2010 por el gobierno de Abel Caballero, cinco años antes de la finalización de la concesión y a cambio de 30 millones en inversiones en la ciudad) se ha hecho «en 9 días», en una Junta de Gobierno «convocada a última hora, del último día» y «en secreto». «¿Qué se esconde aquí?», ha cuestionado.
Por otra parte, ha recordado que la empresa ingresa cada año unos 40 millones de euros de los recibos que pagan los vigueses, y ha recordado que el gobierno local no ha dado explicaciones sobre «a qué se destina» ese dinero.
Según ha incidido Marnotes, el alcalde debería, ya antes de que expirase el tiempo de la primera prórroga, «explicar qué se hizo, qué inversiones», teniendo en cuenta que los vigueses «pagan el agua más cara de Galicia», y tiene un servicio deficiente, con parte de la red sin separación de pluviales, y con una estación potabilizadora «obsoleta».
Finalmente, el portavoz del PP ha afeado al regidor que, en lugar de cumplir su compromiso de hacer un nuevo pliego, para modernizar el servicio y adaptarlo a los tiempos actuales (el contrato en vigor data de 1990), «echa la culpa a la Xunta» de que el recibo se encarezca y de la prórroga. «Hay que ser canalla», ha sentenciado.