El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, ha asegurado que el expediente iniciado contra el ginecólogo que encabezó las protesta contra el cierre del paritorio en el Hospital de Verín, Javier Castrillo, parte de la denuncia de una pediatra y «no afectará al servicio».
En su comparecencia durante el pleno de la Cámara, el titular de Sanidade ha explicado que hay un proceso administrativo abierto derivado de la denuncia de esta especialista por considerar que no le dio un trato «adecuado» ante una familia.
«El Sergas tiene a tal efecto mecanismos de inspección independientes y contrastados en más de 25 años de historia que, con rigor, método y garantías, resuelven estas situaciones», ha manifestado.
Según ha indicado, el proceso se inició en diciembre del año pasado, se recabó la documentación correspondiente y se efectuaron entrevistas con todas las partes. «La inspección traslada ahora, el 5 de noviembre, lo envía siguiendo estrictamente el proceso administrativo habitual», ha indicado.
En este punto, ha señalado que el doctor Castrillo podrá hacer, en su momento, las alegaciones que estime oportunas. Además, ha destacado que el proceso proporciona todas las garantías a las partes, es administrativo y no afecta ni afectará al servicio que se da a la población.
El conselleiro ha asegurado que la situación en el paritorio de Verín en estos momentos «está normalizada» y que «todo funciona adecuadamente». «El Servizo Galego de Saúde sigue contando con todos los profesionales y reconoce su trabajo», ha indicado.
LA OPOSICIÓN PIDE LA PARALIZACIÓN
El asunto también ha sido abordado por los grupos de la oposición. Así, en primer lugar, el diputado del PSdeG Julio Torrado ha considerado que este expediente responde a una «purga», a una «vendetta». «Párelo, porque es insoportable», ha reclamado.
Por su parte, la parlamentaria del BNG Montse Prado ha sonstenido que, «por mucho» que el conselleiro trate de «darle carácter de mero carácter administrativo» al expediente, «no oculta la realidad» ya que «ni todas las denuncias se inspeccionan, ni todas acaban en expediente».
«No tienen ninguna justificación para incoarlo más allá de la venganza por defender los derechos de las mujeres a partir en el hospital de Verín», ha manifestado para exigir que, «como máximo responsable» de la sanidad gallega «paralice» este expediente.
Enfrente, la parlamentaria popular Encarna Amigo ha subrayado que «quien decide, una vez que el niño nace» es la pediatra. «La pediatra pone una denuncia ¿Y que pasa, se esconde? No, el Sergas tiene que defender a todos los profesionales, otra cosa sería esconderla y no hablar más», ha considerado.
HECHOS
Según explicó a Europa Press el propio Castrillo, la actuación por la que se le incoa el expediente se remonta al 30 de noviembre de 2019, jornada en la que nació el que, en principio, estaba llamado a ser el último niño que nacería en el centro sanitario comarcal.
Castrillo sostuvo que el niño nació «sin complicaciones ni ningún problema» y señaló que las matronas ratificaron que así era, pero la pediatra de guardia recomendó que «se derivase al niño a Ourense», topándose con la oposición del jefe de Ginecología, por no ver razón para ello.
Finalmente, el bebé acabó siendo trasladado, pero el Sergas notifica ahora un expediente al ginécologo, según su versión, por contravenir la decisión de otra profesional, en este caso la pediatra, lo que considera una falta «grave».