El grupo municipal Marea de Vigo ha denunciado este lunes la «degradación» del servicio de bus urbano en la ciudad, que se constata desde que se amplió la concesión de ese servicio, y ha criticado que ese empeoramiento se ha notado tanto en las condiciones laborales, como en las «carencias» relativas a la prevención del COVID-19.
Así, el portavoz del grupo, Rubén Pérez Correa, ha recordado que el propio comité de empresa ha puesto de manifiesto estos problemas, a los que se suman el servicio deficiente a las parroquias, o la falta de refuerzo en horas puntas, que se ha traducido en autobuses repletos en determinados horarios.
Pérez Correa ha vuelto a denunciar la ampliación de la concesión, justificada por el gobierno de Vigo por la pandemia y por las pérdidas de la empresa durante el estado de alarma. A ese respecto, el portavoz de Marea ha apuntado que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha emitido un informe «contrario a la ampliación».
Según ha recordado, el propio alcalde, Abel Caballero, admitía hace unos meses que el contrato de bus (con la concesionaria Vitrasa) era «injusto y desfasado» en su sistema tarifario, y que no cubría las necesidades de la ciudad.
Por ello, Marea de Vigo ha pedido «anular» la ampliación de la concesión, y aprovechar la oportunidad para rediseñar un nuevo modelo de transporte urbano, empezando por «trabajar en la remunicipalización» del servicio.