El alcalde de Vilaboa, César Poza, ha acometido la reestructuración del Gobierno local, en el que el PSOE ha quedado en minoría después de que el grupo municipal del BNG rompiese el pacto de coalición.
«Todos los concejales tienen como prioridad el diálogo como camino principal y el bien común de los vecinos como único destino obligado», ha precisado el regidor, dirigiéndose a los ediles nacionalistas y populares que conforman la oposición.
Tras mantener una reunión interna el pasado lunes para acordar el reparto de responsabilidades, el regidor municipal ha detallado que, además de coordinar todas las áreas desde la alcaldía, también dirigirá personalmente los departamentos de Cultura y de Obras que anteriormente gestionaban los ediles nacionalistas Carlos Acuña y Cándido Rosendo.
En cuanto a Obras, se licitarán «con premura las actuaciones más importantes para el ayuntamiento», ha precisado el gobierno local en un comunicado, mientras que la nueva programación cultural será «adecuada y diversa».
OTRAS ÁREAS
Los departamentos de Promoción Económica y Sectores Productivos, que atendía la portavoz municipal del BNG, Ornela Fernández, han pasado a Carmen Gallego, que también gestionará Hacienda e Igualdad.
Las áreas de Servicios y de Juventud, que en el antiguo pacto de gobierno formaban parte de las competencias del BNG, han recaído en María Canosa y Brais Sánchez, respectivamente. Mientras que la primera completará sus responsabilidades con Servicios Sociales, Emigración y Cementerios, su homólogo socialista mantendrá sus deberes al frente de la concejalía de Deportes y Turismo.
Por último, José Manuel Piñeiro seguirá dirigiendo Urbanismo e Infraestructuras y, a partir de ahora, se hará cargo también de Medio Ambiente y Ahorro Energético, que atendía el exalcalde Francisco Costa.
La concejala de Educación y Nuevas Tecnologías, María Dolores Cerqueiro, completa la reasignación de las áreas que venía gestionando el PSOE al incorporar Sanidad.
Según el gobierno local, este nuevo reparto responde a la situación generada por la pandemia: «Siendo un gobierno de convencimiento, unido y corresponsable, la distribución de las competencias se ajusta a las necesidades y a la realidad actual del ayuntamiento y sus vecinos». César Poza ha insistido en la necesidad de «conseguir el equilibrio entre diálogo y capacidad resolutiva» manteniendo los «ideales» del PSdeG-PSOE, pero con Vilaboa como «único compromiso».
BNG
Por su parte, la portavoz del BNG ha sido convocada este miércoles, 26 de agosto, por primera vez desde la toma de posesión del nuevo alcalde el pasado jueves, a una reunión con César Poza para abordar el traspaso de información y la planificación que el grupo nacionalista había trazado de las concejalías que gestionaba hasta el pasado 17 de agosto, cuando anunció su decisión de abandonar el gobierno local.
«Esperamos que se desarrollen tanto los proyectos firmes como los que se dejaron encaminados», ha señalado Ornela Fernández en declaraciones a Europa Press. En adelante, desde la oposición, el BNG de Vilaboa se ha comprometido a «exigir y vigilar que sigan adelante y no se echen atrás» los planes «asentados» desde anteriores mandatos y que la ciudadanía ya considera «como propios», ha concluido.