El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha lamentado que el Partido Popular haya mantenido en Bruselas una postura, ante las medidas y ayudas para la recuperación de la situación sanitaria, que, dijo, supongan una «ultra condicionalidad» para España, y ha acusado a la formación que dirige Pablo Casado «en lugar de ayudar» haya «crispado» durante la pandemia.
«¿Si el PP no arrima el hombro ante la crisis más grave de los últimos 100 años, cuándo va a arrimar el hombro el PP?», se ha preguntado el jefe del Ejecutivo central, que este sábado ha arropado al candidato del PSOE a la Presidencia de la Xunta, Gonzalo Caballero, en un mitin, el primero en el que participa en la denominada ‘nueva normalidad’ y en una jornada en la que, precisamente, Pablo Casado también se encuentra de campaña electoral en Galicia.
«El PP lo que hizo, en lugar de sumar, fue crispar», ha lamentado Pedro Sánchez, que ha contrapuesto esta postura con un «gobierno» que tenía «como objetivo» único «derrotar el virus». Mientras, censuró, «la derecha se puso como objetivo derrotar al Gobierno». «Se equivocaron de objetivo y fracasaron», ha enfatizado.
En una intervención en la que ha defendido las últimas medidas adoptadas por el Gobierno del Estado –como la ampliación de los ERTE o la cobertura para autónomos y un fondo de más de 16.000 millones de euros para financiar las consecuencias de la crisis sanitaria–, Pedro Sánchez ha remarcado que su Gobierno lo que pedía era «unidad» para el objetivo de salvar vidas y el empleo.
El presidente del Gobierno ha lamentado que el Ejecutivo tuvo que adoptar las principales medidas «solo», «sin el apoyo del principal partido de la oposición, que dimitió de su responsabilidad». «Si no arrima el hombro ante la crisis más grave de los últimos cien años, cuándo va a arrimar el hombro el PP», se ha preguntado Sánchez, quien ha acusado a los populares de «en lugar de suma, crispar» y «en lugar de estar unidos, dividir».
«NO ES LO MISMO QUIÉN GOBIERNE EN CRISIS»
Por eso, «no es lo mismo quién gobierne una época de crisis», añadió Sánchez, quien también ha destacado el diálogo con los sindicatos para acordar medidas para mantener el empleo de la población con «millones de trabajadores que hoy se sienten más seguros» y «más de un millón de autónomos cobrando una nómina o prestación por cese de actividad», una medida «sin precedentes», frente a la reforma electoral del PP, contrapuso.
En esta línea, también defendido que, «frente a los recortes en educación» de los populares, el Gobierno que dirige ha dispuesto «2.000 millones a las comunidades autónomas», así como ha reivindicado el ingreso mínimo vital, que «va a ascar a 850.000 hogares de la pobreza», haciendo especial hincapié en los niños.
Y mientras, añadió, «el tercer bloqueo» que el PP ha «planteado» es el de la digitalización, el «bloqueo a los avances» en esta materia, ha denunciado.
RESPUESTA COMÚN EUROPA
En este escenario ha lamentado la postura del PP, que «va a Bruselas a decir que los fondos de la recuperación para España deben exigir una ultra condicionalidad», en referencia a la postura de los populares en cuanto a las condiciones sobre el Fondo de Recuperación de la UE, de 750.000 millones de euros, en la línea de las exigencias de países como Dinamarca, Austria, Suecia y Países Bajos.
«Por fin Europa ha entendido que hay que dar una respuesta común, conjunto, y ¿qué es lo que ha hecho el PP?, va a decir a Bruselas que los fondos para España deben exigir una ultra condicionalidad», ha lamentado, para «exigir al PP que se sitúe al lado de los intereses» de España. «Si perdemos, no pierde el Gobierno, pierde Galicia y pierde España», ha enfatizado.
«SER MURO» FRENTE AL COVID
En su discurso en Ourense, el presidente del Gobierno ha lanzado un «ruego» a los ciudadanos ante los rebrotes que se han registrado en los últimos días como consecuencia del coronavirus. «No bajemos la guardia», ha apelado en el que es su primera intervención tras la llegada de la denominado nueva normalidad en el conjunto del país.
«Podemos ser muro o ser transmisor. ¡Seamos Muro!, no bajemos la guardia», ha enfatizado Pedro Sánchez, quien en su discurso en Ourense, en un mitin en el que ha apoyado al candidato socialista a la Presidencia de la Xunta, Gonzalo Caballero, ha reconocido que uno de los momentos «más dolorosos» durante estos meses han sido los casos de los fallecidos por el covid-19 y por eso se celebrará una ceremonia de estado el próximo 16 de julio.
Pedro Sánchez ha agradecido la «disciplina, solidaridad y espíritu de victoria del pueblo español y gallego» a la hora de mantener el confinamiento, pero ha insistido en «no bajar la guardia». «Hagamos todo lo posible por no echar por tierra el enorme sacrificio que todos hemos hecho de forma individual o colectivo», ha clamado.
De hecho, las primeras palabras que ha tenido en su discurso en Ourense han sido de «gratitud» para todos aquellos que han estado en «primera línea», como los profesionales sanitarios, efectivos de todos los cuerpos de seguridad, medios de comunicación y servidores públicos y privados.
Asimismo, ha dado las gracias a la ciudadanía por mantener la «disciplina en unas semanas tan complejas» y ha agradecido también la «enorme dosis de solidaridad». «Gracias a que nosotros mismos nos comprometimos con el confinamiento, hemos estado protegiendo a nuestros seres queridos», ha defendido.
MEDIDAS QUE SE MOSTRARON EFICACES
Sánchez, «orgulloso» de ser el presiente del Gobierno de España, ha sostenido que «es cierto que no se puede hablar en pasado de la pandemia». «Vivimos en presente continuo hasta que la ciencia encuentre un remedio para que la sociedad pueda sentirse segura frente a este virus», ha recordado.
Por ello, y ante los casos de rebrotes, ha pedido cautela a la hora de disfrutar de la normalidad recuperada, «sin bajar la guardia». Así, también ha reivindicado que gracias a las medidas de confinamiento se «mostraron eficaces» frente al virus, ahora «bajo control», y ha defendido que aunque fue uno de los momentos duros como presidente, la declaración del estado de alarma, «un instrumento constitucional», fue una medida que «benefició a todos los ciudadanos».