Los integrantes de la Federación Española de Asociaciones del Camino de Santiago han emitido este lunes un comunicado en el que aseguran sentirse «profundamente entristecidos» por la decisión de eliminar el rito simbólico de derribo del muro de la Puerta Santa para el inicio del Año Santo 2021.
En concreto, la eliminación de este tradicional rito de arranque del Año Santo -el derribo con un mazo del muro levantado para tapiar la Puerta Santa antes de la ceremonia- se ha eliminado este año para prevenir que el polvo levantado dañe la recién terminada restauración interior de la Catedral.
En su lugar, este año, el Arzobispo de Santiago, Julián Barrio, realizará el rito golpeando tres veces la puerta cerrada con un martillo ceremonial realizado en plata y donado en 2019 por un matrimonio alemán.
Posteriormente, se abrirá la puerta y accederá por ella primero el arzobispo y después todo el cortejo procesional. En el interior de la basílica se celebrará misa.
DESAPARICIÓN DE RITOS
Las asociaciones lamentan que este rito se sume a otros «desaparecidos» anteriormente a raíz de las restauraciones de elementos patrimoniales o de la covid-19, como el cabezazo al Santo dos Croques o el abrazo al Apóstol.
«Comprendemos que la pandemia está cambiando nuestras formas de vivir y que el polvo del derribo podría causar suciedad en el interior de la Catedral después del enorme desembolso de dinero que han supuesto las obras», explica el comunicado, que, no obstante, lamenta que «poco a poco desaparece» lo que los peregrinos entienden que «hace ser el Camino lo que es».
«Esperemos que pronto puedan volver algunos o se encuentre la forma de solventar los impedimentos que hoy limitan poder cumplirlos», finalizan.