El juego presencial está regulado por ley en Galicia desde 1985, pero lo que no regula esta ley es el juego online, de momento. Las protestas vecinales en algunos barrios de ciudades gallegas querían llamar la atención sobre lo que veían como una proliferación grave de locales de juego. Padres y madres mostraban su preocupación por la apertura de estos centros, bajo el temor de que afectara a la vida de sus hijos e hijas. Mostraban su temor ante la posibilidad de problemas de ludopatía entre menores y adolescentes.
El sector del juego en Galicia asegura que las normas se cumplen de manera estricta, que no se registraron problemas con menores. Por otra parte, algunas voces dentro de asociaciones para la rehabilitación de personas adictas al juego, son cautas sobre las estadísticas que hablan de un porcentaje elevado de adolescentes adictos al juego.
¿SON TANTOS LOS ADOLESCENTES ENGANCHADOS?
¿Se podría cuantificar la cantidad de gente nueva adicta al juego? Juan Lamas, de la Asociación Gallega de Jugadores Anónimos ( AGAJA), señala que “lo que notamos y certificamos desde hace mucho tiempo es que el 20% de menores de edad lo reconocen abiertamente durante la campaña de prevención que realizamos”. Lamas dice que estos datos están avalados por estudios de la USC sobre adicciones.
Aun así, desde AGAJA apuntan que no se pueden tasar el número de personas adolescentes adictas al juego presencial en salones especializados, porque la entrada de menores está prohibida. “No hay un estudio clínico sobre ludopatía en adolescentes porque legalmente no pueden jugar, no se pueden dar cifras en España y menos a nivel Europeo”.
No obstante, se creó una alarma social entre padres y madres que llevó a movilizaciones para protestar contra la presencia de estos salones recreativos en determinados lugares. La reacción fue casi inmediata por parte de la Xunta de Galicia. A raíz de una protesta vecinal, concretamente en Vigo, en el barrio de Navia, por la apertura de una sala de apuestas, “la administración salió con un decreto de la noche a la mañana diciendo que no autorizaba más licencias de apertura, tardan dos días y aun así, tienen que respetar las licencias o peticiones que estaban en marcha” dice Lamas.
Serafín Puertas, presidente de la Asociación Gallega de Empresas Operadoras (AGEO), apunta que “efectivamente hubo incremento de salones”. Serafín Portas analiza este aumento desde la perspectiva de un cambio en el mundo de la hostelería. “El concepto de la hostelería ha cambiado y donde antes había una taberna o bar, cambiaron a gastrobar, o picoteo, donde una máquina tragaperras no tiene sentido ni es rentable”.
El cierre o transformación de locales hace que los propietarios también se desprendan de las máquinas que pasan a un almacén. Así estarán hasta que sean o bien recicladas o que algún empresario del sector del juego. “Entonces al mejor alguien puede decir de montar un salón de juego, esto no quiere decir que todos los salones sean rentables” señala Portas. Según el presidente de AGEO, los salones de juego exigen mínimo diez máquinas de las llamadas Tipo B.
¿DÓNDE ESTÁ LA ADICCIÓN?
El juego online con apuestas incluidas, está señalado también como un elemento capaz de enganchar a los más jóvenes. Sin embargo, Juan Lamas asegura que “la regulación del juego online, a nivel estatal tiene una serie de filtros que no tiene el juego presencial”. Esos filtros consisten en registrarse en un operador de juego legal dando el DNI y la dirección postal. Seguidamente, se verifica con el padrón de habitantes y con el registro de autoprohibidos.
Si hablamos de usurpación de personalidad, si el adolescente usa el DNI del padre o del hermano mayor, hay una verificación en caso de que exista sospecha. “Todas las operaciones que se hacen en Internet están monitorizadas por la Dirección General del Juego” señala Lamas. “Esto no se da en el juego presencial, porque en ese caso se está bajo la responsabilidad de la persona responsable del salón o del bar”.
“Creemos que no se está siendo justo con el sector del juego presencial” afirma Serafín Puertas, quien considera que analizando cómo profesional el contexto actual hubo un punto de inflexión. “El juego online generó mucha publicidad que entendemos está sin control, nosotros desde el juego presencial, sabemos que hay gente preocupada por regular este tema”. Así el presidente de AGEO insiste en que se especifique cuáles son los tipos de juego que ahora mismo crean adictos y adictas.
LEGISLACIÓN
La ley gallega del juego de 1985 solo contemplaba el juego presencial, que se hace en locales físicos. La llegada de Internet hizo que, en algunos puntos y aspectos, quedara desfasada. La Vicepresidencia de la Xunta, con competencias en esta materia señala que es “plenamente consciente de la preocupación social que se está generando alrededor del juego”. Por ese motivo “lleva meses trabajando en un nuevo texto legislativo de la Ley de Juego que permitirá actualizar la anterior”, con la premisa de “adaptarla a los tiempos actuales, a los nuevos modelos de juego y regular un juego responsable. Un texto que está buscando el máximo consenso”.
Dicha ley está aún en proceso de elaboración y por el momento, el decreto del mes de julio de 2019 impide que se emitan más licencias. La concesión de estos permisos “está a expensas de la aprobación de la ley del juego, que lleva seis meses parada en el ejecutivo gallego”, dice Juan Lamas. “Creo que la Xunta está trabajando y recogiendo todas las sugerencias de las partes implicadas, eso necesita un tiempo para recoger todos los aspectos necesarios” dice Serafín Portas.
Actualmente la legislación sobre distancias para los locales de juegos es de 150 metros en caso de haber un centro educativo, 300 metros de distancia entre un salón de juego y otro y 1.000 metros entre bingos. La Xunta, no obstante, en un email enviado a Galicia Confidencial, asegura que las distancias podrían variar en el futuro texto sobre el juego, así como las medidas de seguridad con respeto a la entrada de menores en salones recreativos.
De momento queda una pregunta, si se monitoriza el juego online y se prohíbe la entrada a menores en salas de juego, ¿entonces cómo se puede explicar adicción al juego entre menores de edad? Por otra parte, la legislación gallega de 1985 estaría desfasada y de ahí que se esté preparando una nueva ley.