Las unidades del dolor que hay en las siete áreas del Servizo Galego de Saúde (Sergas) superaron en 2024 las 44.000 consultas, un 40 por ciento más que en 2020. Esta cifra, en palabras del conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, refleja no solo un incremento de la demanda, sino también la confianza en el modelo asistencial, que evoluciona e incorpora las nuevas tecnologías.
Así lo ha manifestado durante su intervención en la mesa inaugural del curso de verano ‘Nuevas tecnologías en el abordaje del dolor: avances y oportunidades’, organizado en el Pazo de Fonseca de Santiago por la Sociedad Española del Dolor en el Pazo de Fonseca.
El conselleiro, oncólogo de profesión, ha señalado especialmente el tratamiento al dolor en pacientes de cáncer. En estos y en otros casos, «la inteligencia artificial (IA) puede cambiar el manejo de pacientes con dolor, la manera de diagnosticar, tratar y medir el dolor».
Gómez Caamaño ha explicado que el Sergas emplea tanto la IA como la telemedicina y los aparatos de monitorización. En este sentido, ha puesto como ejemplo al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), que tuvo la primera unidad acreditada de dolor oncológico por parte de la Sociedad Española de Calidad Asistencial.
Sanidade cuenta con una línea específica para el tratamiento del dolor dentro de su estrategia de calidad y segurida del paciente, a lo que se suma una Comisión Galega da Dor, para mejorar la coordinación de todo el territorio y actualizar guías clínicas al respecto.