Los presupuestos de la Consellería de Infraestruturas e Mobilidad para 2022 reflejan una subida del 1,4% respecto a las del presente ejercicio al ascender hasta los 536,29 millones de euros, de los cuales, 102,6 irán a parar al desarrollo de actuaciones vinculadas a infraestructuras sanitarias en hospitales y centros de salud.
La conselleira del ramo, Ethel Vázquez, ha sido la encargada de abrir la ronda de los titulares de consellerías para desgranar las cuentas de sus departamentos de cara al próximo año en la Comisión 3ª de la Cámara gallega, por la que también pasarán este martes los responsables de Medio Rural, José González, y Emprego e Igualdade, María Jesús Lorenzana.
Al inicio de su intervención, Vázquez ha asegurado que la subida del 1,4%, que se traduce en términos absolutos a 7,4 millones de euros, «no es un incremento comedido» puesto que las cuentas del presente ejercicio de 2021 hubo «un aumento del 18,1%», lo que refleja un «incremento progresivo» de la inversión en materia de Infraestruturas e Mobilidade.
Así las cosas, casi un euro de cada cinco del presupuesto del área que dirige Ethel Vázquez irá a parar en 2022 a actuaciones vinculadas a infraestructuras sanitarias. Entre ellas destacan los 35,6 millones de euros consignados en 2022 para la ampliación del hospital Gran Montecelo de Pontevedra, una obra que la Xunta espera culminar entre finales de 2023 y principios de 2024.
Además de las obras del hospital de la capital provincial pontevedresa, también están los 14,56 millones para la primera fase de la ampliación del CHUF de Ferrol, otros 9 millones para el nuevo hospital de A Coruña o los 21,84 millones para las obras en el CHUO de Ourense.
En total, las partidas para remodelaciones en los hospitales de las ciudades gallegas se llevan 81,9 millones de euros, el 80% de las actuaciones de infraestructuras sanitarias y 15% del total del presupuesto de la consellería para 2022.
Los centros de salud del barrio A Milagrosa en Lugo (6,25 millones), el de Lalín (7,88), el de Ourense (3,19) y el Olimpia-Valencia de Vigo (2,3) completan las principales partidas en actuaciones sanitarias para el año 2022, que se llevan más de un tercio de los 270 millones de euros con los que cuenta de presupuesto la Axencia Galega de Infraestruturas para 2022.
Este último es el departamento que más crece respecto al presente ejercicio, con un incremento del 6,34%, y también el de mayor volumen presupuestario, pues se lleva la mitad del total de los 536 millones de euros de la consellería.
El resto se reparten entre Augas de Galicia, con 137 millones de euros (+3%) consignados para actuciones relacionadas con infraestructuras y gestión del agua; la Dirección Xeral de Mobilidade, que dispondrá de 114,3 millones para servicios de transporte; y los 12 millones restantes, que corresponden a la Secretaría Xeral Técnica de la consellería.
Este departamento, como ha explicado ante la Comisión 3ª la titular del ramo, asumirá la gestión de los fondos europeos Next Generation, además de otras actuaciones como el desarollo de aparcamientos disuasarios en los accesos de las ciudades.
CARRETERAS Y MOBILDIDAD
El resto de las partidas de la Axencia de Infraestruturas se dividen entre las obras en carreteras y autovías las partidas para transporte en autobús. En esta última, Ethel Vázquez ha subrayado el aumento de «un 80%» en el presupuesto para la Tarxeta Xente Nova, el programa de gratuidad en los desplazamientos en autobús para los menores de 21 años.
Para actuaciones en vías de altas prestaciones se reservan 46 millones de euros, de los que una cuarta parte van a parar a trabajos en la Vía Árbatra de cara a su conexión con la AP-9. El resto se divide en obras como el primer tramo de la autovía Nadela-Sarria (casi 8 millones), la VAC Tui-A Guarda (10,7 millones) o la VAP de la Costa da Morte (7,53).
Infraestrutras también cuenta con 45 millones el próximo año para «reforzar» la seguridad vial y 6,6 millones para avanzar en el plan de eliminación de tramos de concentración de accidentes.
En cuanto a movilidad, 85 millones de euros irán a parar al desarrollo del Plan de Transporte Metropolitano de Galicia y al mencionado programa de gratuidad para los viajes en autobús de los menores de 21 años.
En este apartado también figuran las actuaciones en materia de intermodalidad, entre las que figuran 4 millones para la estación de A Coruña, 1 millón para la de la de Lugo y 2 millones repartidos entre cabeceras de comarca como O Carballiño, Vilagarcía y Cangas.
AUGAS DE GALICIA
Por último, Augas de Galicia, encargada de la gestión de servicios e infraestructuras relacionadas con la gestión del agua, un ámbito en el que la Xunta ultima un nuevo marco normativo que ha despertado críticas entre las entidades locales, manejará un presupuesto de 137 millones. De estos, 102 irán a parar a líneas de apoyo a los ayuntamientos en el ejercicio de sus competencias en materia de saneamiento y depuración.
A su vez, 40,5 de estos 102 millones se reservan para la ejecución de infraestructuras del saneamiento de las rías. Otros 25 millones del total del presupuesto de Augas corresponden a la gestión de las 28 depuradoras municipales que ejerce la Administración autonómica y que, según Vázquez, se ha visto obligada a incrementar la cuantía dedicada a esto ante la subida de la tarifa eléctrica.
Completan las principales actuaciones en materia de aguas los 7 millones que la Xunta prevé dedicar a las zonas en riesgo de inundación como Padrón y Valga (río Sar), Carballo (Anllóns), Sada (Maior) o Viveiro (Fontecova).
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Por su parte, los grupos de la oposición, BNG y PSdeG, han criticado los presupuestos de la consellería, a la que afean su «falta de ambición» y de «proyecto» en asuntos como la vertebración territorial o el impulso a una movilidad sostenible.
En este sentido, el diputado nacionalista Luís Bará ha acusado a la Xunta de estar «en el paleolítico en cuanto a políticas de movilidad», al tiempo que ha acusado al Ejecutivo gallego de ser «un mini gobierno, una diputación ampliada», como, a su juicio, refleja la «hoja de ruta marcada por la rutina» que evidencian las cuentas de la consellería para 2022.
Por su parte, la parlamentaria socialista Patricia Otero también puso el foco en la «desidia» que aprecia en el Gobierno gallego y su responsable de Infraestruturas e Mobilidade, que «año tras año viene a hablar de las mismas infraestructura porque nada se ejecuta».
Por parte del grupo mayoritario y sustento del Gobierno intervino el diputado popular Diego Calvo, que defendió que «habría que preguntarse» por el hecho de que existan partidas de actuaciones que «aparecen año tras año» y que no se llevan a cabo «pese a que la Xunta las tiene comprometidas», algo que, para el del PP, es responsabilidad de las administraciones locales.