El alcalde de Santiago de Compostela, Xosé Sánchez Bugallo, ha argumentado que la incidencia del coronavirus en las ciudades gallegas es «muy homogénea», con datos de contagios «muy semejantes», al ser preguntado por una posible repercusión del aumento de turistas, visitantes y peregrinos sobre la transmisión del Covid-19 en la capital de Galicia.
Santiago de Compostela vivió el pasado fin de semana el Día del Apóstol, con los tradicionales fuegos y actividades de conmemoración de las fiestas, por lo que muchos peregrinos aprovecharon para hacer coincidir su llegada ante la Catedral con el 25 de julio.
Preguntado si esa afluencia masiva de visitantes que se pudo percibir en las calles compostelanas durante el pasado fin de semana pudo influir en que Santiago de Compostela entrase este sábado en el nivel alto de restricciones por coronavirus, el alcalde respondió: «No lo sé. Es posible que todo tenga algún tipo de incidencia, pero lo cierto es que los datos de Santiago no son peores que el resto de las ciudades gallegas».
«Los nuestros no están precisamente entre los peores de las siete grandes ciudades», agregó, tras subrayar que él «nunca» cuestionó las medidas decididas por el comité clínico para contener la propagación del virus. «Siempre entendí que había que aceptarlas, acatarlas, colaborar con ellas, cumplirlas y hacerlas cumplir. Y voy a seguir en esa línea», indicó.
LLAMAMIENTO A LOS MÁS JÓVENES
No obstante, sí quiso alertar de que lo que se percibe es un «mayor incremento» de contagios entre la población de 16 a 20 años de edad y que «empiezan a aparecer bastantes casos menores de 16 años». Además de apostar por la vacunación en este segmento de edad, Bugallo apuntó la necesidad de «conseguir que esos jóvenes sean conscientes de que no son inmunes».
A ellos se dirigió para advertirles de que, aunque normalmente sufran consecuencias «menos graves» por el coronavirus que las personas mayores, se desconoce «qué efectos secundarios podrán quedar a medio o a largo plazo», aparte de constituir «un riesgo de transmisión muy importante».
«Es necesario que las familias estemos pendientes y que ellos sean responsables de sus propios actos», reclamó. «Ahora mismo es muy difícil pensar que la administración pública, que las fuerzas de seguridad tuviesen un poder universal para estar detrás de cada uno. Eso es imposible. Pueden hacer lo que pueden hacer, pero la responsabilidad personal es muy importante», proclamó.
El regidor compostelano puso en valor la «enorme sensibilidad» por parte de comercio y hostelería para cumplir y hacer cumplir las normas antiCovid. Lo ilustró con una anécdota personal: hace un par de días le prohibieron la entrada en un pub de Santiago a un grupo en el que él iba junto a dos secretarios de Estado porque una de las personas no llevaba el certificado que acreditase su inmunidad. «Así se actúa», concluyó.