El alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, informa de que la ciudad cuenta este lunes con 346 casos activos de coronavirus, en una tendencia «preocupante».
Con todo, muestra su «esperanza» de que haya una mejoría a partir de la segunda quincena de este mes después de un «incremento sostenido» esta semana. Eso sí, augura que el primer trimestre va a «ser muy duro».
Asimismo, la incidencia acumulada a 14 días está en 308 casos en Compostela. Unas cifras «realmente elevadas» con una evolución al alza, que se encuentran por encima de la media gallega, aunque es inferior a la española, según el regidor.
Por ello, llama a la ciudadanía a ser «extraordinariamente prudentes», al tiempo que ha mostrado su «respeto» por las decisiones del comité clínico y pide cumplirlas.
«Ya sabíamos que este primer trimestre iba a ser muy duro, va a serlo», deja claro Bugallo, en un mes de enero «particularmente difícil». De hecho, las hipótesis más preocupantes «empiezan a confirmarse», por lo que espera que comience a generalizarse la vacuna en próximas semanas.
Sobre este extremo, muestra su «preocupación» por el avance de la campaña de vacunación. Avisa de que, al ritmo actual de 18.000 vacunas semanales en Galicia, se necesitarían cinco años para completar la inoculación de toda la población, dado que son necesarias 5,4 millones de dosis –dos veces por cada uno de los 2,7 millones de habitantes–.
«DIFÍCIL VIABILIDAD» DE HOSTELERÍA Y COMERCIO
El alcalde considera que la movilidad «está directamente relacionada» con la velocidad de transmisión en la ciudad. Incide en que las reuniones familiares y sociales son «el principal foco», mientras resalta que en la hostelería solo registra un porcentaje muy pequeño de contagios.
Así, ha mostrado su comprensión hacia la situación que atraviesan la hostelería y el comercio por las restricciones, que hacen «muy difícil la viabilidad de ambos sectores».
A renglón seguido, Sánchez Bugallo reflexiona acerca de que la restricción de movilidad «es mortal de necesidad» para el comercio compostelano, más allá del impacto sobre hoteles y agencias de viajes, entre otros.
MÁS DE UN MILLAR DE DENUNCIAS
Por su parte, desde el comienzo de la pandemia se han tramitado en la capital de Galicia más de un millar de denuncias por infracciones relacionadas con la covid.
Las fiestas en pisos y los incumplimientos de no llevar mascarillas acumulan la mayor cifra de denuncias, con más de 300 en cada caso. Remarca que el Ayuntamiento repartió entre 30.000 y 40.000 mascarillas de manera gratuita.
Asimismo, se han realizado denuncias en relación con el incumplimiento del toque de queda y el límite perimetral, entre otras cuestiones.