El equipo directivo del IES Illa de San Simón de Redondela (Pontevedra) ha presentado su dimisión por la situación generada alrededor del inicio del curso y la reapertura del centro al alumnado debido a la falta de atención por parte de la Xunta a sus peticiones para ampliar el personal de limpieza para reforzar las tareas de desinfección e higienización por la COVID-19.
El escrito, que fue presentado este martes ante la jefatura territorial de Pontevedra, defiende el trabajo de preparación realizado desde junio para poder iniciar el curso en condiciones de seguridad. Para ello, han presentado solicitudes debidamente justificadas para poder contar un refuerzo de personal de limpieza junto con mediciones realizadas por la unidad técnica.
El centro cuenta con un limpiador a jornada completa y otra a media jornada y una superficie de entre 2.900 y 3.000 metros cuadrados repartidos en cuatro edificaciones. En el escrito acreditan que, con los medios actuales, esta trabajadora tendría que asumir las tareas en unas 3,5 horas, cubriendo todos los cambios de clase, del mismo modo que el otro empleado tendría que encargarse de 20 aulas, el aula COVID, un pabellón de 700 metros cuadrados, biblioteca, sala de profesores, 11 aseos, 16 despachos, corredores y vestíbulo.
El equipo directivo «no está dispuesto a asumir la responsabilidad» de abrir un centro «que no cumpliría con las condiciones de higiene básicas impuestas» por la Xunta, ante la imposibilidad de hacerlo con los medios humanos disponibles en la actualidad.
«Tal situación va contra la salud de nuestro alumnado y personal y podría tener consecuencias legales en el caso de un brote», advierten. Por ello, teniendo en cuenta que la solicitud de personal no ha sido atendida y que las tareas realidades hasta el momento exceden las propias de su puesto y sus conocimientos de prevención de riesgos, han decidido presentar su dimisión.
OTROS CESES
En las semanas previas, el equipo directivo del IES Plurilingüe Adormideras de A Coruña también había presentado su renuncia para denunciar el «menosprecio» hacia la comunidad educativa por parte de la Xunta y los «continuos cambios en el protocolo contra la COVID-19».
Los trabajadores del centro difundieron imágenes a través de redes sociales para visibilizar las consecuencias de la separación de un metro entre cabezas (permitida por Educación mediante la instalación de mamparas) y protagonizaron protestas a las puertas del centro.
Por otro lado, la directiva del CEIP Pedro Caselles Rollán de Xove también habían presentado su dimisión por las condiciones del centro, en obras durante el arranque del curso en infantil y primaria y con aulas no preparadas ante la pandemia.