Los servicios sanitarios han detectado un nuevo brote familiar, con seis casos positivos, en el municipio coruñés de Arzúa, un área en la que hace poco más de una semana se detectaron tres casos, también con vínculos familiares, pero que no tienen relación con estos últimos.
Según han informado a Europa Press fuentes del área sanitaria, este brote afecta a seis casos positivos, todos ellos de la misma familia. Se trata de un foco «localizado y cerrado», en el que se descarta transmisión local.
Se da la circunstancia de que en la misma área, concretamente en el vecino municipio de Melide, se detectó hace poco más de una semana un foco con tres casos positivos, también con vínculos familiares e importado. No obstante, fuentes sanitarias han apuntado que los dos focos no tienen relación entre ellos.
En todos los casos se ha procedido a aislar a las personas con PCR positiva así como a sus contactos directos, que ya han sido rastreados, por lo que los focos se consederan cerrados.