La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ha instado a la Xunta de Galicia a que ejerza sus competencias en materia industrial en vez de «buscar culpables» ante un posible cierre de Alcoa en San Cibrao (Lugo) y le ha pedido lealtad institucional para mantener el empleo industrial en la comunidad.
Así lo ha señalado la ministra en su intervención en el pleno del Senado de este martes, en el que ha hecho un llamamiento a todas las administraciones públicas, agentes sociales y fuerzas políticas para trabajar juntos y evitar los despidos anunciados por la multinacional norteamericana productora de aluminio.
En su respuesta al senador del PP José Manuel Barreiro, quien ha atacado al Ejecutivo por no aprobar un marco legislativo que dé estabilidad al precio de la energía –uno de los principales problemas que alega Alcoa–, la ministra le ha recordado que la última legislación respecto a este asunto fue aprobada por un Gobierno de su partido político.
Barreiro, sin embargo, ha insistido en que el Gobierno ha estado engañando a los trabajadores durante los dos últimos años, después de que, en octubre de 2018, prometiese la aprobación de un estatuto electrointensivo que intentase mitigar el problema del precio de la energía y que todavía siga sin haberse aprobado.
Maroto, por su parte, ha dicho que la «inestabilidad política» y «unas cuantas elecciones» habrían imposibilitado la aprobación del estatuto, junto con la situación creada por la pandemia de Covid-19, aunque ha puesto en valor el paquete de medidas aprobado por el Gobierno de cara a la industria, como el refuerzo de las ayudas al CO2, el Plan Reindus o una inversión de 114 millones de euros en la región.
CRUCE DE ACUSACIONES
Por el contrario, el senador del PP le ha lanzado una pregunta: ¿Qué le hemos hecho los gallegos a este Gobierno?, culpando a la ministra de «no haber hecho nada» para solucionar este problema, que considera que es que el 40% del coste de la fábrica corresponde a un único elemento, el coste de la energía.
En su respuesta, ha sido Maroto la que ha acusado al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de no hacer nada y de no interesarle la política industrial a su partido, que «se cargó el Ministerio de Industria», pero sí es algo sobre lo que la comunidad tiene competencias.
Por ello, le ha instado a que ejerza sus competencias industriales y a que no abandone la política industrial, ya que «tiene consecuencias» y que deje de buscar culpables y, en su lugar, busque soluciones, ya que afirma que la Xunta también conoce los problemas y la «difícil situación» de Alcoa, tras la caída de la demanda y del precio del aluminio.
La ministra ha vuelto a recordar que la compañía ha recibido ayudas por valor de más de 37 millones de euros en los dos últimos años, «con el esfuerzo de los españoles», y ha apelado a la «unidad de acción y a la lealtad institucional» de todas las administraciones para mantener el empleo.