El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, se ha quejado de la actitud con la que el Gobierno central trata a las comunidades, con las que «no delibera» antes de adoptar decisiones, al tiempo que le ha afeado que «confiscase» a Galicia 100 millones de euros de políticas activas de empleo. En todo caso, él ha garantizado que mantendrá la lealtad en el marco de la lucha contra el COVID-19.
Tras el Consello de la Xunta, el también líder del PP gallego ha resaltado el «alto grado de lealtad, la enorme lealtad» con la que su partido, con Pablo Casado al frente, actúa en el ámbito estatal. A modo de ejemplo, ha recordado que convalidó la prórroga del decreto de alarma, mientras que el Gobierno cambió después «radicalmente el criterio de la actividad económica» en la «noche de un domingo» y «sin informar» al principal partido de la oposición.
Preguntado por la coordinación con las comunidades, también ha lamentado que en la última videoconferencia de presidentes empezó a percibir que los dirigentes autonómicos acudían a esta cita «más como personas a las que se les iba a informar que con responsables con los que deliberar» antes de tomar decisiones.
A modo de ejemplo, ha aludido al decreto que paraliza toda la actividad económica excepto la esencial, al tiempo que ha censurado que se puedan destinar los recursos de políticas activas de empleo para financiar subsidios. Tal decisión supone, ha denunciado, «confiscar 100 millones de euros» a Galicia.
«Es una decisión sin precedentes, que invade claramente las competencias autonómicas y totalmente inesperada. Esos 100 millones son de Galicia, están en los presupuestos de la comunidad y esa confiscación nos va a impedir hacer las políticas de formación comprometidas», ha advertido el mandatario gallego.
Según ha relatado, ocho programas de formación pactados con diversos sectores –entre ellos el naval, la automoción o el forestal– no podrán ser adjudicados por el paso «unilateral» del Gobierno de Sánchez y 34.000 gallegos que iban a beneficiarse de esta formación para desempleados «no lo podrán hacer».
MEJORAR LA ACTITUD
Feijóo ha avanzado su intención de trasladar el domingo –cuando habitualmente se celebran las videoconferencias de presidentes– su «discrepancia profunda» con la decisión del Gobierno y ha advertido que sería «muy importante» que este cambiase su actitud con las comunidades para «mantener la lealtad y altura de miras» que exige la crisis sanitaria del coronavirus.
En todo caso, ha garantizado que la posición gallega pasa por «mantener la lealtad» y «acatar todas las decisiones» que adopte el Gobierno central.
«Pero también decirle lo que pensamos, porque entiendo que los presidentes cuando nos reunimos es para decir lo que pensamos. Si no esas reuniones serían absolutamente prescindibles», ha zanjado.