Las tareas de rescate del buque ‘Blue Star’ –que encalló la noche del 22 de noviembre en la costa de Ares (A Coruña)– llevadas a cabo por Salvamento Marítimo tuvieron un coste de 1,2 millones de euros, al tiempo que remarca que «la responsabilidad» derivada de los daños «los asume la empresa aseguradora» de la armadora.
De ello ha informado el Gobierno central en contestaciones por escrito realizada a preguntas en el Congreso del BNG, que recoge Europa Press.
Entre los meses de enero y febrero el Gobierno contesta a varias preguntas formuladas por el diputado del BNG en la Cámara baja, Néstor Rego. Así, asegura que no se ha producido «contaminación alguna», tras dejar de estar varado el 10 de diciembre.
En su relato de lo acontecido en la noche del 22 de noviembre, el Gobierno explica que el ‘Blue Star’ solicitó asistencia a las 22,33 horas tras perder velocidad y declararse un incendio en la máquina. Así, el seguimiento de la emergencia por parte de Salvamento Marítimo «fue continuo y se tuvo conocimiento de la embarracada en tiempo real».
Entre los medios movilizados, estuvieron el buque de salvamento ‘María Pita’, el remolcador del puerto de Ferrol ‘Hocho’, la embarcación de intervención rápida ‘Salvamar Betelgeuse’ y el helicóptero de salvamento ‘Helimer 401’.
Posteriormente, a las 22,45 horas el ‘Blue Star’ reportó que había fondeado, «pero estaba garreando», si bien el fuego estaba bajo control. Tras ello, embarrancó a las 23,37 horas.
A LA ESPERA DE LA INVESTIGACIÓN DE LA CIAIM
Según explica el Ejecutivo central, el embarrancamiento del ‘Blue Star’ impidió llevar a cabo la inspección submarina de su casco, por lo que se estudiaron los tanques de lastre y combustible desde el interior del buque.
Así, «se advirtió que gran parte de los tanques de agua de lastre se encontraban dañados y comunicados con el agua del mar». Personal de Salvamento Marítimo embarcado en el ‘Blue Star’ realizó la inspección de manera inmediata tras la extinción del incendio declarado a bordo.
Sobre el operativo, el Gobierno asegura que la relación entre las admnistraciones afectadas por la situación «fue constante y fluida en todo momento».
Finalmente, recuerda que la investigación sobre las causas del siniestro corresponde a la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim).
A mediados del mes de febrero, el dueño del ‘Blue Star’ decidió que el barco abandonase los muelles de Ferrol, en donde se realizaron obras de emergencia en su casco, para poner rumbo a Turquía con el fin de ser desguazado.