El presidente de la Autoridad Portuaria de Vigo, Enrique López Veiga, ha rechazado este viernes las acusaciones de quienes lo señalan como responsable de poner dificultades o tratar de frenar el proyecto de construcción y reparación naval que el grupo Vicalsa tiene para las instalaciones del astillero Vulcano (en proceso de liquidación).
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Administración del Puerto, y a preguntas de los periodistas, López Veiga ha insistido en que no está «en contra de nada», y se ha limitado a recordar que la posición de este organismo, que ha recurrido el proceso de liquidación de Vulcano y ha solicitado informe al Consejo de Estado sobre la concesión, está avalada por la Abogacía del Estado.
A ese respecto, y tras reiterar que la petición del informe al Consejo de Estado se cursó por los cauces legales, y «no por la vía más larga», ha informado de que el propio grupo Vicalsa ha comunicado al Puerto su intención de «esperar» por ese informe.
Si dicho informe avala las tesis del Puerto, que sostiene que la concesión no puede ser objeto de liquidación porque ha quedado extinguida al disolverse Vulcano, el grupo Vicalsa hará una solicitud de concesión «de acuerdo con el artículo 84» de la Ley de Puertos. «Al final Vicalsa dice que el Puerto tenía razón, que es mejor esperar al informe del Consejo de Estado y luego remitirán la solicitud», ha añadido, y ha recordado que esa concesión será sometida a un proceso de concurrencia, por si alguna otra empresa está interesada.
Sobre las críticas de Asime, que ha denunciado la «política activa» del Puerto para poner «todas las dificultades del mundo» al proyecto de Vicalsa, Enrique López Veiga ha aseverado que «lo que digan ciertos personajes» le da «igual». En la misma línea, ha respondido con un «hacen bien» a quienes, como Marea, BNG o la CIG, han pedido su dimisión, y les ha recordado que «el Puerto tiene que aplicar la ley».