Delegadas y delegados de la CIG han secundado una jornada de concentraciones, ante edificios de la Xunta, en distintas localidades gallegas para reivindicar un plan gallego de recuperación económica y de protección social, así como plenas competencias para Galicia en materia laboral, económica y fiscal.
Las mismas han estado precedidas de la celebración de asambleas como paso previo a las 17 movilizaciones que la CIG ha convocado para el Primero de Mayo, que este año conmemora bajo el lema ‘Trabajo, Derechos, Soberanía. Galicia contra las Guerras’.
El secretario xeral de la CIG, Paulo Carril, que asistió a la asamblea y la concentración en la ciudad herculina, demandó plenas competencias para la comunidad autónoma en materia laboral, económica y fiscal «para decidir nuestro modelo económico y social como alternativa viable para vivir y trabajar dignamente en nuestro país».
Antes, ha reivindicado un plan gallego de industrialización y de creación de empleo «con intervención pública en sectores estratégicos» y que la generación de industrias sea «en base a la riqueza de nuestro país».
«Cerrando los ciclos productivos y no ante un proceso depredador para ahondar en la condición colonial», ha dicho rechazando que Galicia sea una «despensa de recursos».
Por otra parte, pidió un plan gallego público de atención y cuidados en materia de dependencia frente a la «mercantilización de los servicios públicos» y una política social «donde el parque de viviendas sea una realidad».
Ha sido en una jornada con asambleas en todas las comarcas de cara al Primero de Mayo y para exigir con estas concentraciones un cambio de política al PP, cuyas actuaciones, según Carril, están llevando «a un avance de la desigualdad, la pobreza y privatización grave de los servicios públicos».