La Xunta subraya que el traspaso de los servicios de Cercanías es «un asunto con gran relevancia que debe abordarse con diálogo y consenso de todas las comunidades autónomas».
De esta forma se pronuncian fuentes de la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade consultadas por Europa Press después de que el ministro de Transportes, Óscar Puente, haya abierto la puerta a traspasar los servicios de Cercanías a todas las comunidades.
«A Galicia –señala el departamento autonómico– le gustaría que antes de hablar de un traspaso de las competencias en transporte ferroviario, el ministro aclarase cuáles son las previsiones del Gobierno de España para transformar líneas tan importantes como A Coruña-Ferrol, A Coruña-Lugo, Ferrol-Ribadeo o Vigo-Ourense en conexiones competitivas propias del siglo XXI».
En esta línea, la consellería considera «urgente y prioritario para Galicia conocer cómo y cuándo va a solucionar el Gobierno de España los problemas continuos que sufren los servicios ferroviarios de proximidad en Galicia como consecuencia de una mala gestión por parte de Renfe».
Desconociendo «las repercusiones» que supondrá para el resto de las comunidades la cesión de las competencias de Cercanías a Cataluña, Infraestruturas apunta a «implicaciones» para el personal de Renfe y para la gestión de los servicios.
«De igual forma que desconocemos el alcance y la letra pequeña de las condiciones en las que se produciría ese hipotético traspaso de los servicios de Cercanías a las demás comunidades autónomas», indica.
«NO PUEDE ESTAR DE ACUERDO»
En cualquier caso, «si el ministerio mantiene la concepción al respecto de los servicios ferroviarios que recogía en el proyecto de ley de movilidad sostenible», la Xunta afirma que «no puede estar de acuerdo».
«Porque lo único que promovía ese proyecto de ley es el desmantelamiento paulatino de los servicios ferroviarios, especialmente en el rural, acabando con el tren de media distancia y traspasándole a las comunidades la responsabilidad de ese transporte», concluye.