El sindicato CIG ha alertado este miércoles de que el sector del Metal de la provincia de Pontevedra está abocado al «conflicto» si no hay un cambio radical» en la postura de la patronal, con la que se está negociando el convenio colectivo.
Así lo ha trasladado el secretario nacional de CIG-Industria, Xoán Xosé Bouzas, en Valga, a donde la central ha trasladado sus protestas, con una concentración frente a la sede de Urovesa, empresa del presidente de la Asociación de Industrias del Metal y Tecnologías Asociadas (Asime).
Este acto se enmarca en el calendario de protestas que la CIG está llevando coincidiendo con la negociación del convenio. El sindicato celebrará asambleas este viernes a partir de las 19,30 horas en diferentes puntos de la provincia para trasladar a los trabajadores la última propuesta de los empresarios, que califican como «un desprecio y una provocación».
En esas reuniones también se abordará la posibilidad de «intensificar las acciones de protesta para forzar a la patronal a cambiar el fondo y la forma» en las negociaciones. Así, han denunciado que las empresas plantean un convenio «inasumible», con una subida salarial «irrisoria» y con «recorte de derechos».
Así, la patronal ha propuesto subidas de 0,5 % en 2023, 2 %en 2024 y 2 % en 2025; eliminar la limitación de contratos por ETT, ampliar de 6 a 12 meses los contratos de duración determinada por circunstancias de producción, limitar las vacaciones en determinados meses del año, o eliminar algunas mejoras sociales, entre otras medidas.
La CIG ve esas propuestas como una «burla» y ha señalado que la falta de trabajadores cualificados, que tanto denuncian las empresas, se debe a que «lo que quieren son esclavos». El sindicato ha advertido de que no permitirá la pérdida de derechos adquiridos, reclama la actualización de salarios según el IPC, una reducción de jornada anual y la subrogación del personal de empresas privadas.
La CIG también ha denunciado que la patronal «utiliza» la mesa de negociación para aplazar el acuerdo, y así mantener los sueldos «congelados» y sin aplicar mejoras.
El sindicato nacionalista ya convocó una asamblea y una manifestación en Vigo el pasado 11 de mayo, y este miércoles ha tenido lugar la concentración de Valga.