Una resolución judicial que fija el desalojo de tres pizarreras de Carballeda de Valdeorras (Ourense), a instancias de la junta de la comunidad de montes de Portela-Trigal que reclama los terrenos que alquilaba a las compañías, amenaza unos 300 empleos en la comarca.
Al respecto, el Clúster da Pizarra de Galicia y la Asociación Empresarial de Valdeorras han mostrado su apoyo conjunto a los trabajadores que «podrían verse afectados por la orden de lanzamiento para desalojar a las empresas Samaca, Irosa y la antigua Pizarras Trevinca de los terrenos en los que se ubican actualmente».
Así, ambas entidades califican de «desproporcionada» la reclamación realizada por los comuneros de la Junta de Montes de Portela-Trigal, al tiempo que muestran su apoyo a los empresarios afectados.
Avisan de que, de materializarse el lanzamiento de las compañías, «incidiría negativamente en la economía de la zona», también con un impacto en las ventas del comercio local.
Esta situación se produce en el marco de un enfrentamiento vecinal que se arrastra desde hace años por el control de la comunidad de montes de Portela-Trigal.