Stellantis Vigo negociará un nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) con los sindicatos a comienzos de 2023 debido a la crisis de microchips y las dificultades logísticas que la compañía atraviesa para movilizar los vehículos fabricados en la fábrica de Balaídos.
Así lo han asegurado este martes fuentes de la empresa consultadas por Europa Press, que señalan que todavía se desconocen las fechas en las que Stellantis Vigo comenzará a mantener contactos con los sindicatos para tratar la posibilidad de llevar a cabo un nuevo ERTE en la factoría de Balaídos, planta que cuenta con unos 6.400 trabajadores.
La decisión de la multinacional se conoció en la reunión que el comité de empresa mantuvo este lunes, 19 de diciembre, pero que, según han señalado fuentes sindicales a Europa Press, no se hará efectiva «hasta la vuelta de vacaciones de los trabajadores», que pararán las máquinas desde este viernes, 23 de diciembre, hasta el próximo martes, 3 de enero.
«La previsión de la compañía es que la situación se solucione a finales de 2023, pero para llegar hasta esa fecha tendrá que pasar todo un año. Ahora mismo, tal y como está la situación, vemos que no van a dejar de producirse paradas pero ojalá no se llegue al ERTE», han lamentado fuentes sindicales.