Adicae ha avisado de que las medidas que se están proponiendo desde el sector bancario para reducir la presión a los hipotecados con dificultades por la subida de los tipos de interés pueden incrementar la deuda de los hipotecados y ha reclamado una «auténtica y efectiva» moratoria legal y la obligatoriedad del código de buenas prácticas.
En un comunicado, el presidente de Adicae, Manuel Pardos, ha alertado de que conceptos como congelación de las hipotecas o moratorias sectoriales «esconden medidas cuyos principales beneficiarios son las propias entidades bancarias, al incrementar finalmente el coste de intereses a pagar por los hipotecados».
Según sostiene, la banca aspira a evitar la adopción de medidas regulatorias y está planteando «fórmulas voluntarias, sin sujeción a control alguno y completamente discrecionales», y que les permiten mantener o incluso incrementar el pago total de intereses (al retrasar el pago del capital mientras se siguen pagando intereses) y reducir su necesidad de provisiones por morosidad, sin garantía alguna de que todos los consumidores que necesitan medidas extraordinarias se ven beneficiados por ellas.
En este escenario, Adicae ha incidido en que, ante una situación como la actual, solo tienen cabida «medidas normativas», entre las que propone que se opte por una «auténtica y efectiva» moratoria legal sobre las hipotecas y las ejecuciones hipotecarias y se revisen y amplíen las condiciones fijadas en el Código de Buenas Prácticas para acceder a las medidas en él contempladas, fijando dicho Código como obligatorio y supervisando su aplicación, entre otras medidas.
DATOS
En un comunicado, Adicae destaca que Galicia es la comunidad donde menos han aumentado las ejecuciones hipotecarias, alcanzando un 15% de incremento.
Las cifras de ejecuciones hipotecarias, a su juicio, «ponen al descubierto el error de dejar a la banca gestionar libremente medidas como las moratorias».
Y es que aumentaron el primer semestre de 2022 en Cantabria, Extremadura y Madrid respecto a 2021. En Navarra el crecimiento en 2021 fue del 60%, mientras que Cataluña, Andalucía, Valencia y Madrid lideran las ejecuciones hipotecarias desde 2020.