El tráfico del Puerto de Vigo ha experimentado un crecimiento de algo más de 11 % en el pasado mes de mayo, con buenas cifras en los movimientos de mercancías, a excepción de algunas, como los tráficos de automoción, que siguen cayendo.
Según el informe de gestión trasladado este martes al Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, el tráfico de mercancías en mayo ha crecido casi un 13 %, con incrementos significativos en materiales como los metales y sus manufacturas (+163 %), carbones (+137,8 %), abonos y piensos (+ 116 %), aceite de pescado (+83,4 %), harina de pescado (+45 %) o cereales (60 %). También ha experimentado una subida la pesca congelada (+9,76 %).
En el balance de mayo arroja igualmente datos positivos el tráfico de contenedores, con una subida de casi el 30 %; y el tráfico de pasajeros, que ha aumentado en el caso de los cruceros y en el transporte de ría.
Por contra, la falta de aprovisionamientos y las paradas de actividad en la planta de Stellantis Vigo se siguen notando en la terminal olívica en el mes de mayo, con una caída en los movimientos de vehículos del 38,5 % y un descenso del 12,8 % en lo que respecta a piezas de automoción. Asimismo, ha experimentado descenso la pesca congelada, con un 6,57 % menos.
Con respecto a los datos acumulados, el tráfico del Puerto de Vigo ha experimentado un incremento de un 0,22 % entre enero y mayo, con respecto al mismo período del año pasado. Así, el tráfico de mercancías ha crecido un 0,70 %.
Las principales mercancías con números positivos en tráficos acumulados son cereales, conservas, frutas, cereales, metales o papel. En la otra cara de la moneda, hay descensos en los tráficos acumulados de vehículos (- 29 %), piezas de automoción (-31,9 %), pesca fresca (-0,32 %), pesca congelada (-2,46 %), o maquinaria (-17 %).
AMPLIACIÓN DEL SILO DE BOUZAS
Por otra parte, el presidente del Puerto, Jesús Vázquez Almuíña, ha informado en rueda de prensa de la adjudicación de la asistencia técnica para redactar el proyecto de ampliación del silo de coches en la terminal de Bouzas.
Dicha ampliación permitirá ganar otros 60.000 metros cuadrados en altura para el almacenamiento de vehículos y la previsión es que el año próximo puedan comenzar las obras. Los trabajos tenían un presupuesto estimado de entre 20 y 25 millones de euros, aunque será el proyecto el que fije el coste.
Finalmente, cuestionado acerca de la situación de Astillero San Enrique (antigua factorías Vulcano), el presidente del puerto ha recordado que se le otorgó la concesión con unas «condiciones muy dura» y debe cumplir ciertos requisitos, entre ellos, de inversiones.
«Iremos midiendo su actividad, haremos seguimiento», ha explicado, al tiempo que ha confirmado que, aunque el Puerto mantiene su intención de comprar la parte privada del astillero, la empresa no está dispuesta a vender por el momento, por lo que habrá que esperar a la aprobación de la DEUP (Delimitación de Espacios y Usos Portuarios) y los trámites ambientales para llevar a cabo la expropiación.