El Gobierno destinará ayudas por hasta 150 millones de euros para un plan de repotenciación de las instalaciones eólicas más antiguas, la renovación de minihidráulicas y el reciclaje de palas de aerogeneradores, según anunció la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
En su participación en el III Foro Internacional ‘Expansión’, Ribera indicó que este jueves se ha lanzado a consulta pública la propuesta de orden para las bases de estas ayudas, que buscan «facilitar la modernización de lo que ya existe, para poder recuperar y repotenciar aquello que ya funciona y hacer una gestión correcta de las palas de esos aerogeneradores, que están a punto de llegar al final de su vida».
La ministra, que añadió que estas ayudas se enmarcan en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) del Gobierno y de la Estrategia Española de Economía Circular, señaló que esta convocatoria representa una «señal relevante» para el sector y permitirá que al menos 435 megavatios (MW) eólicos sean repotenciados y otros 50 MW hidroeléctricos sean renovados, así como una capacidad anual de reciclaje de cerca de 19.000 toneladas de palas y otros materiales compuestos del aerogenerador.
Ribera puso en valor que desde 2018 España ha aumentado su potencia instalada renovable desde el 46,7% hasta el 57,2%, con la instalación de un 238% más de potencia fotovoltaica y un 23% más de eólica.
En concreto, este programa de ayudas se divide en tres programas de ayudas a la repotenciación de instalaciones eólicas, a la renovación tecnológica y medioambiental de minicentrales hidroeléctricas de hasta 10 MW y a instalaciones innovadoras de reciclaje de palas de aerogeneradores.
Las ayudas se otorgarán en régimen de concurrencia competitiva y las actuaciones deberían estar finalizadas antes del 31 de diciembre de 2025 respetando el principio de ‘no causar un daño significativo’ al medioambiente, según consta en la propuesta de orden.
Las ayudas de estos programas serán financiadas con el Mecanismo Europeo de Recuperación y Resiliencia, dado que las actuaciones objeto de la misma se encuentran contempladas dentro de la Inversión 1 del Componente 7 (C7.I1) «para el desarrollo de energías renovables innovadoras, integradas en la edificación y en los procesos productivos».
Además, la iniciativa contribuye positivamente y de manera transversal a los objetivos de almacenamiento con fuentes de energía renovable relativas al Componente 8, «despliegue del almacenamiento energético» y a los objetivos de despliegue de la economía circular en España relativas al Componente 12, «plan de apoyo a la implementación de la normativa de residuos y al fomento de la economía circular».
REDUCIR LA DEPENDENCIA DE LOS COMBUSTIBLES FÓSILES.
Por otra parte, Ribera insistió en la necesidad de «reducir la dependencia» de los combustibles fósiles, algo que no se ha sido capaz de hacer en los últimos 50 años.
En este sentido, recalcó que se debe apostar por «cambiar de paradigma» y «acelerar» la transición energética, aunque es algo que no solo depende de científicos y gobiernos, sino que «es un cambio que depende de toda la sociedad».
«Hay que adoptar de forma urgente una actitud para acelerar la transición energética, para contar con precios razonables y estables a largo plazo, y el marco europeo es muy propicio para ello», dijo al respecto.
Asimismo, Ribera destacó que el agua es una «de las prioridades» de la hoja de ruta del Gobierno y que se debe invertir en «el uso adecuado de uno de los bienes más preciados».