La Asociación Internacional de Puertos (IAPH) ha premiado el proyecto ‘Living Ports’ de la Autoridad Portuaria de Vigo como uno de los mejores del mundo en la categoría de Infraestructuras Sostenibles, en la que competía contra las terminales de Rotterdam, Hamburgo, Vancouver y la cooperación de puertos de Gladstone (Australia).
Según ha informado el Puerto de Vigo, el reconocimiento se ha otorgado tras el resultado de la evaluación del jurado y el voto del público, y se ha entregado la pasada madrugada en Vancouver.
La terminal olívica, que ya obtuvo este premio hace dos años con su proyecto ‘Peiraos do Solpor’, ha visto de nuevo reconocida una iniciativa, en este caso ‘Living Ports’. Se trata de un proyecto financiado por la UE en su estrategia de Crecimiento Azul, y apuesta por operar un cambio en las operaciones de la industria de infraestructura costera y marina, sustituyendo las instalaciones tradicionales grises y obsoletas por otras inclusivas y sostenibles.
‘Living Ports’, que tiene un presupuesto de algo más de 3 millones de euros, se desarrolla a través de un consorcio formado por cuatro socios de tres países: ECOncrete, proveedor de tecnología israelí para soluciones ecológicas; Puerto de Vigo; el astillero vigués Cardama; y los Institutos de Ingeniería Civil y Recursos Acuáticos de la Universidad Técnica de Dinamarca (DTU).
El jefe del Departamento de Sostenibilidad del Puerto, Carlos Botana, y el jefe de División de Proyectos y Obras, Gerardo González, han sido los encargados de recoger el galardón, y han destacado que el premio es «fruto del trabajo conjunto» y de la apuesta decidida de la Autoridad Portuaria de Vigo por las «infraestructuras verdes».
Además, el proyecto da un paso más y prevé la construcción de un ‘observatorio submarino’ de 310 metros cuadrados, en la dársena de Laxe. Esta estructura, diseñada por Cardama, servirá para observar la flora y la fauna marina que colonizarán las estructuras de hormigón ecológico que se instalarán sobre la pared del muelle.
Por otra parte también se actuará en la escollera del muelle ro-ro de Bouzas, con la instalación de un centenar de unidades de CoastaLock, la primera pieza de hormigón diseñada por la firma israelí con principios ecológicos-biológicos. El proyecto contempla, además, una monitorización durante 2 años tanto estructural como biológica de las piezas instaladas en ambas zonas, que será realizada por la Universidad Técnica de Dinamarca (DTU) y, adicionalmente, se llevará a cabo una monitorización del sonido subacuático en las áreas con y sin piezas ECOncrete, que mostrarán el impacto de esta tecnología y de la vida marina en el Puerto.