La conselleira do Mar en funciones, Rosa Quintana, ha expresado que la Xunta y el sector acogen con «cierta tranquilidad» la postura votada en el Parlamento Europeo este martes para no prohibir la pesca de arrastre en zonas protegidas con carácter general, sino vincularlo a que lo avalen estudios científicos.
En declaraciones a los medios antes de participar en un acto de la campaña saludable ‘Vai de Peixe’, en Santiago de Compostela, Quintana ha celebrado que un eventual veto a estas artes sea siempre basado «en datos científicos», si bien esta postura votada en la Eurocámara no se trataba todavía de «ninguna decisión» definitiva.
En concreto, el pleno del Parlamento Europeo aprobó el pasado martes una resolución no legislativa para que se prohíba la pesca de arrastre en ciertas partes de las áreas protegidas para impedir la pérdida de biodiversidad y contribuir a la conservación de los ecosistemas marinos. Sin embargo, esta petición presentada por la eurodiputada socialista portuguesa Isabel Carvalhais, contó con una enmienda de los populares para matizar que esta prohibición debe atender a informes científicos.
En este contexto, la titular de Mar ha recordado que la Xunta ya acreditó «con informes» que el empleo de estas artes, «siempre que se utilicen bien», «no perjudica a ningún ecosistema». Además, Quintana ha asegurado que tanto la Comisión Europea como los estados tienen «suficientes medidas» de acuerdo con el reglamento comunitario de control pesquero «para evitar que haya un mal uso» de estos métodos de captura.
«Desde Galicia se hicieron todos los informes, se aportaron ya a la Comisión Europea y le demandamos que nos aporte datos científicos que puedan tener ellos» para plantear una posible prohibición total en estas zonas, ha insistido la conselleira do Mar en funciones.
Y es que un veto a estas artes, tal y como ha reiterado, causaría que la flota artesanal fuese «la gran perjudicada». «Cuando la propia Comisión Europea está defendiendo la flota de artes menores ahora saca una nueva medida que haría que la rentabilidad de la flota sea nula», ha cuestionado, para seguidamente pedir a las instituciones comunitarias «un poco de seriedad» con estos planteamientos y que estén «soportados con un documento científico».