El Colegio Oficial de Administradores de Fincas de Galicia, Coafga, ha alertado de un incremento de la morosidad en las comunidades de propietarios, un hecho que atribuyen al incremento sostenido de los precios del gas y la luz y a las derramas realizadas para poder pagar las facturas.
Así lo señala en un comunicado remitido a los medios, en el que pide medidas urgentes para bajar los precios y la posibilidad de que las comunidades de propietarios puedan acogerse al mercado regulado del gaspara optar a tarifas más competitivas.
Según señala el Colegio de Administradores de Fincas de Galicia, las comunidades con calefacción centralizada se consideran grandesconsumidores por lo que solo pueden contratar el suministro de gas en el mercado libre, no pudiendo elegir del regulado, que es más flexible. «Se les aplica la tarifa reservada a uso industrial, pese a que el destinatario final de ese servicio es el usuario de una vivienda, que tiene como principal finalidad la habitabilidad y el confort del hogar», señala.
Al respecto, los administraciones recuerdan que, como ocurre con laelectricidad, existe un mercado libre y otro regulado al que únicamente, en el caso del gas, pueden acceder los pequeños consumidores -particulares- o los que accedan a las redes de gas conun consumo máximo de 50.000 kWh anuales.
Pero las comunidades de propietarios, apuntan desde el colectivo, no podrán optar a esta tarifa, porque obligatoriamente tienen que vincularse al mercado libre ibérico del Gas (MIBGAS), con precios muy por encima de los establecidos por el Gobierno para el mercado regulado.
Así las cosas, denuncian que las comunidades de propietarios están «discriminadas» por no poder acceder al mercado regulado, siendo el precio del Kwh casi del doble para los edificios colectivos frente a los suministros individuales.
Por ello, piden al Gobierno la posibilidad de que las comunidades de propietarios puedan cambiar la tarifa o, incluso, suspender sus contratos en el mercado libre -normalmente con vigencia de un año- y acogerse, como los particulares, al mercado regulado, que ofrece mejores tarifas, con el consiguiente ahorro.
Además, señalan que otra opción es reducir el IVA del gas o el impuesto de hidrocarburos, de igual forma que se ha hecho en el recibo eléctrico. «La gente tiene dificultades económicas y si a esto le sumamos la inflación y el hecho de que los ahorros empiezan a terminarse… la situación es crítica», alertan.