La Xunta de Galicia ponde de nuevo a disposición de las familias gallegas las ayudas del bono eléctrico, con un presupuesto de 1,9 millones de euros para que los hogares que más lo necesitan puedan hacer frente a la factura de la luz y evitar, así, los cortes de suministro.
Las nuevas ayudas, que en 2021 llegaron a 5.278 familias, van dirigidas a consumidores con una mayor vulnerabilidad desde el punto de vista económico. Los destinatarios deben ser personas residentes en Galicia y titulares de un servicio de suministro eléctrico.
Las ayudas se otorgan por concurrencia no competitiva –es decir, por orden de entrada de la solicitud– a todos cuantos cumplen los requisitos y suponen un 50% de la factura eléctrica correspondiente a la vivienda habitual del solicitante con una cuantía máxima anual de 300 o 450 euros –en el caso de familias numerosas–.
Además, estas familias con más dificultades que se beneficien de este programa de apoyos verán garantizado el acceso continuado al suministro en los hogares, dando así respuesta a una necesidad básica de los ciudadanos, pues no se les podrá cortar el servicio mientras sean beneficiarios de esta ayuda.
Además, se establece un plazo máximo de un mes desde la presentación de la solicitud hasta su resolución, por lo que una vez que se compruebe que se cumplen los requisitos, se realizará el pago por parte de la Vicepresidencia económica directamente a las empresas comercializadoras de referencia con las que se renovará el protocolo de colaboración. Este pago será mensual, según se remitan las ayudas.
GALICIA, PIONERA
Galicia fue pionera en esta línea de ayudas en el año 2018. Desde entonces se concedieron 15.030 ayudas por un importe de algo más de 4,8 millones de euros. Antes, la Xunta contaba con el tique eléctrico y con ayudas para evitar los cortes de suministro de las que se beneficiaron entre 2014 y 2017 más de 12.500 familias. Por lo tanto, desde 2014 hasta ahora, la cuantía global de las ayudas asciende a 6,35 millones de euros, y con más de 27.000 beneficiarios.
La Xunta, además, ha reiterado la necesidad de que el Gobierno central ponga en marcha «un plan de choque coordinado con las comunidades autónomas para paliar el incremento de precios de la electricidad que está lastrando la competitividad de pymes, autónomos y de la industria en general, y afectando a la economía de las familias».