Vestas ha decidido prorrogar hasta este lunes, 8 de noviembre, el periodo de consultas del ERE que afecta a la fábrica de Chavín, en Viveiro (Lugo), cuyo plazo de negociación terminaba este viernes.
Tras un nuevo encuentro en Santiago de la mesa industrial, el presidente del comité de empresa de Vestas, David Mariño, ha indicado que la compañía «fijó unilateralmente» que esa prórroga sea solo hasta el lunes, pero trabajadores y administraciones coinciden en demandar que la ampliación debe realizarse hasta fin de año con el objetivo de que se dé tiempo a una búsqueda de inversores.
Así, apunta que «hay una postura clara de todos los representantes de esta mesa industrial», pues los trabajadores están «respaldados» por la Xunta y Gobierno central en la petición. Remarca que «hay una cuenta atrás» y «se necesita más tiempo» para encontrar un posible comprador.
Ahora, comité y empresa se emplazan a una nueva reunión que tendrá lugar el lunes en Viveiro (a las 16,00 horas), en donde los trabajadores expondrán la necesidad de esa ampliación.
Según apunta Mariño, la empresa dice que «puede mantener la actividad laboral para toda la plantilla hasta final de diciembre», por lo que «no debería tener ningún problema» en ampliar la negociación. Aunque «hoy no dejaron clara la postura» los representantes de Vestas, confía en que «igual pueden pensarlo».
NUEVO INVERSOR
Por otra parte, la conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana, ha informado de que hay un nuevo posible inversor para la planta, de forma que ya son nueve la empresas con interés en la compra, si bien no puede dar «más datos» al ser «muy incipiente».
Al respecto, Mariño explica que «no hay más información» sobre ese nuevo interés de una empresa. «Todavía estamos empezando con ese tema», razona, por lo que «pueden salir más intereses» o «salir adelante cualquiera de esas empresas con algún tipo de oferta».
Junto a esto, Lorenzana señala que «lo trascendental» es que «necesitan los trabajadores más tiempo para poder decidir en condiciones sobre el despido colectivo», dado que «ahora mismo no se sabe todavía el futuro de la compañía». Cree «imprescindible» que haya acuerdo entre compañía y trabajadores para una ampliación «mínima» hasta final de 2021.
«Si la empresa tiene una intención de colaborar en el proceso de transición, de venta a otro competidor, además decirlo, tendría que actuar en consecuencia», avisa. Lorenzana deja claro que esa ampliación «nada supone» para la compañía y «sería muy importante» para que los trabajadores puedan decidir, «y no cogiendo una indemnización por miedo a lo que pueda suceder».
Asimismo, Lorenzana ha criticado que por parte del Ministerio de Industria «no se ha llevado a cabo ningún búsqueda de ninguna empresas», pues «manifestaron que están esperando a que se localice alguna empresa por parte del Gobierno autonómico o la propia Vestas para, a partir ahí, activarse». Una postura que reprueba por «decepcionante».