Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha aumentado la vigilancia y la protección en el viaducto del río Ulla, que conecta Catoira (Pontevedra) y Rianxo (A Coruña) en el Eje Atlántico de Alta Velocidad, para evitar accesos no autorizados.
De este modo, se instalarán cámaras con sistemas de detección de movimiento, se aumentará la vigilancia en la zona y se sustituirá el vallado actual por un cerramiento urbano mixto, según ha trasladado el administrador ferroviario.
Las actuaciones cuentan con un plazo de ejecución de un mes y buscan evitar accesos no autorizados a la superestructura y el tablero del viaducto dado el riesgo que pueden comportar para las personas y las circulaciones ferroviarias.
En cuanto a los sistemas de seguridad, se prevé la instalación de cámaras de vigilancia en diferentespuntos del viaducto que estarán dotadas con sistemas de detección de movimiento para vigilar posibles accesos no autorizados a la estructura.
Asimismo, Adif intensificará la vigilancia del entorno del viaducto del Ulla, que se puso en servicio en 2015, mediante el aumento de las patrullas y las rondas de vigilancia realizadas por su servicio de seguridad. Adicionalmente, el vallado existente, de malla de simple torsión, será sustituido por un cerramiento urbano mixto integrado por hormigón y una estructura metálica.