El tercer plan de rescate de la Xunta para autónomos y empresas para hacer frente a las consecuencias de la pandemia de la covid ha consumido en torno a la mitad del presupuesto, que era de 234 millones con cargo a fondos estatales, por lo que el Gobierno autonómico prevé lanzar otra convocatoria con el resto de los recursos en la segunda quincena de octubre.
De ello ha informado la conselleira de Emprego, María Jesús Lorenzana, en una rueda de prensa en la que ha hecho balance de la primera orden, de junio, con un «resultado decepcionante y preocupante» y un total de 5.562 solicitudes a día de hoy –el plazo termina el 30 de septiembre–.
Las previsiones de la consellería pasan por que se consuma en total «aproximadamente el 50%» de ese presupuesto asignado de 234 millones, lo que confronta con las más de 80.000 solicitudes recibidas y pagadas en los planes primero y segundo, con 182 millones de la administración gallega.
De este modo, el tercer plan registró un 93% menos de solicitudes, ha advertido. Y ha expuesto las cifras por provincias: 31.600 peticiones en A Coruña con los planes 1 y 2 frente a 2.010 ahora, 10.228 en Lugo entonces y ahora 734, más de 10.300 en Ourense frente a 650 con el tercer plan y unas 30.000 en Pontevedra cuando en esta ocasión se quedan en 2.061.
CALVIÑO, «CON LAS EMPRESAS GRANDES»
La prórroga del tercer plan de rescate supuso únicamente unas 1.300 solicitudes más, en torno a 17 al día, de acuerdo con los datos aportados por Lorenzana, que ha hablado de una iniciativa «estancada» por «causas» que autónomos, pequeñas empresas y varios gobiernos llevan tiempo «diciendo».
Al respecto, la conselleira ha criticado dos requisitos como la obligación de tener deudas pendientes y los límites de las ayudas, junto a la «compleja burocracia».
La última modificación del decreto estatal es del 15 septiembre pero es a su juicio «absolutamente insuficiente», puesto que está «pensando en las grandes empresas, dejando a un lado a los autónomos y las pequeñas empresas y las microempresas».
Y es que, según ha explicado, mantiene la obligación de tener deuda pendiente, si bien «extiende la fecha», y también permite dedicar las ayudas a compensar pérdidas contables. «Pero siguen los límites».
Con estas novedades, la Xunta prevé lanzar una nueva convocatoria en octubre con los fondos restantes de la primera orden e interpretando «al máximo» las actuales condiciones, que estudiará junto a sindicatos, patronal y organizaciones de autónomos.
En las dos primeras semanas de octubre terminará los pagos de la primera convocatoria y sabrá «exactamente» el crédito del que podrá disponer, que, con una «previsión prudente», estima que estará en torno al 50% de los 234 millones.
La titular de Emprego ha constatado que si estos fondos no se gastan habrá que devolverlos al ministerio, antes de criticar que la titular Nadia Calviño «está con las empresas grandes» y no con autónomos y microempresas.