La refinería de Repsol en A Coruña tiene previsto poner en marcha la semana del 13 de septiembre las dos unidades de conversión paradas, según han informado a Europa Press desde la empresa, después de que este miércoles se procediese al levantamiento del expediente de regulación de empleo temporal (ERTE), según avanzó ya la compañía en julio.
Sobre el mismo, la CIG se ha congratulado de la medida, aunque denuncia «el modo de actuar» de la empresa. En concreto, alude a una «nefasta gestión del personal». Al respecto, apunta que «mientras Repsol aplicaba un ERTE, los beneficios ascendieron a 1.250 millones en el primer semestre y los trabajadores fueron obligados a realizar más de mil horas extras».
También recuerda que esta central mostró su rechazo a una medida que, a su juicio, «no se sostenía por ninguna parte». En la misma línea cuestiona que se optase por esta medida e insta a la dirección a contar con los trabajadores y a dejar «en el fondo de un cajón» lo que califica como «artimañas empresariales».
En un comunicado remitido tras el anuncio del levantamiento del ERTE el 1 de septiembre, Repsol defendió «el carácter temporal de la medida y su firme voluntad de revertirla de inmediato en el momento en que las previsiones del mercado mejorasen».